La Breña Asador, Fuenlabrada
Direccion | C. Sauce, 2, Fuenlabrada, Madrid | ||||||||||||||
Telefono | +34 916 49 06 64 | ||||||||||||||
Horas |
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Sitio web | www.restaurantelabrena.com | ||||||||||||||
Categories | Parrilla, Restaurante mediterráneo | ||||||||||||||
Clasificacion | 4.1 61 revision | ||||||||||||||
Empresas similares cercanas Restaurante Arturos Fuenlabrada — Av. de Laredo, 1, Fuenlabrada, Madrid Asador Guzmán — Av. del Vivero, Fuenlabrada, Madrid Restaurante Asador Fuente Labrada — C. de Valparaíso, 10, Fuenlabrada, Madrid Casa Teo — Calle Cmo de Polvoranca, 20, Leganés, Madrid |
La Breña Asador opiniones
61 Comida muy rica, bien producto y mejor trato. Muchos años viniendo.
Antonio un crack asesorando.
Julia, la camarera muy agradable y servicial.
Sin duda el mejor restaurante de la zona sur, producto 100% fresco y de muy buena calidad.
Con una terraza nueva que se esta la mar de a gusto. Está todo buenísimo, especialistas en atún, aunque la carne y el sushi también está ideal! Postres de muerte, sobre todo la tarta de milhojas! Atención de 10 por parte del personal
Una zona de parking donde aparcar sin problemas Los sábados tienen un Dj y da gusto cenar en un ambiente tan agradable con música de fondo. 100x100 recomendable!
Muy buen ambiente en la nueva terraza con grandes ventanales y en el cual entra mucha luz, la comida está buenísima el servicio de camareros rápidos y atentos. 100x100 recomendable.
Uno de los mejores lugares para disfrutar del mejor atun, en Madrid, simplemente delicioso, amplia carta de pescados de excelente calidad, carnes, verduras, guisos caseros, excelente sushi y de los postres y los vinos.sin palabras.
Fuimos un sábado noche tienen una preciosa terraza chill out con dj con musiquita en directo acabamos con copitas. Un lugar para disfrutar con los 5 sentidos.repetiremos seguro.
Primer plato tomate con ventresca.la ventresca ausente total dos cachitos como dos dados. La tengo que pedir y el camarero contestando como molesto. Vergonzoso un plato de 16 euros y racaneando.no vuelvo al lado labellota mucho mejor
Sitio muy caro y poca calidad, me parece un robo 2 euros por persona de servicio de mesa cuando además el pan que ponen es cortado de barra, una ración de cochinillo 28 euros y de crujiente no tenía nada, había un camarero muy majo pero el metro con cara de pocos amigos, una decepción total, para no volver
A sido una gran experiencia. Disfrute muchísimo tanto de la comida como el trato del personal. Volveré seguroy gracias al encargado Antonio
Hemos estado dos veces en el restaurante. Lo primero que llama la atención es la cocina que se puede ver a través de una cristalera. La brasa preparada y la materia prima a la vista ya dejan claro que la comida no va a defraudar y así es. La decoración hace que el sitio sea acogedor y favorece que apetezca estar allí un buen rato. La primera vez que fuimos lo hicimos para una comida en familia en la que disfrutamos del jamón de atún, cochinillo y atún salvaje. Estaba todo increíble. Esto nos llevó a decantarnos por este sitio para celebrar la comunión de mi hijo. Si la primera vez ya fue buena, en esta ocasión tanto nosotros, como los invitados, salimos encantados. El menú para los adultos fue entremeses fríos iberos de bellota; langostinos tigre, gamba blanca y cigala; sorbete de limón; pierna de cordero o merluza. De postre tarta de San Marcos. Los entremeses estaban de espectáculo, el marisco más fresco imposible, la pierna se deshacía y tenía un sabor.la merluza no la probé pero los que si lo hicieron, también disfrutaron de un plato justo en su punto, fresco y delicioso. Para los niños pusieron entremeses fríos (chorizo, salchichón, queso, lomo) con una mini hamburguesa. Después podían elegir entre chuletitas de cordero o escalopín de pollo. Ninguno pudo terminarse los platos. Las chuletas, terminadas por lo mayores jeje, estaban tremendas y el escalopín de pollo, tierno y en su punto.
Es justo decir que los empleados estuvieron de 10. Mariana, Alejandro y Julia (con la que preparamos todo desde el primer día), nos trataron con un cariño y una amabilidad increíble. No hubo ni una pega, ni un problema y eso es difícil conseguir en un día en el que se celebraban más comuniones en el mismo sitio. Cualquier petición era atendida y solucionada con brevedad. Tampoco me quiero olvidar de Antonio, que nos puso todas las facilidades del mundo para que ese día, fuese un día más especial si cabía aun.
Sin ninguna duda, volveremos a disfrutar del restaurante en breve y serán más ocasiones las que lo visitemos.
Julia, Julia, Julia
Nos atendió genial recomendable 100/100 el restaurante el buen hacer de Antonio y su equipo se hace notar, Rosa un encanto y la cocina chapo.
Como siempre, excelente la comida. Cada vez que estoy en este restaurante disfruto de la calidad de los productos, elaborados con buen gusto. Ninguna pega, que penita que la gente no sabe distinguír y apreciar sitios como este. Tantos años que lleva en Fuenlabrada y tan pocas reseñas y publicidad? La verdad que me sorprende.
Gracias, volveremos seguro
Venir a La Breña siempre es un acierto. Buen producto y mejor atención. El atún, su especialidad, riquísimo. Volveremos siempre!
Una noche especial, muy buena comida, todo delicioso, una compañía estupenda y una atención exquisita, gracias Julia por tu atención, volveremos seguro
Un clásico en Fuenlabrada. Un rincón donde poder disfrutar de la comida tradicional con un servicio adecuado y unas instalaciones muy acogedoras. Buenos mariscos y carnes.
Comida el día de Reyes, pésimo servicio y un menu de una calidad muy cuestionada desde luego 50€ no lo vale ni de lejos, el vino incluido era de batalla, batalla.
Decepción total
Reservamos el día de ayer para comer porque no lo conocíamos y lo ponemos en la lista de favoritos no es un sitio barato de de ahí la calidad y el trato.
Los salones son estupendos están separados con vidrios para tener un poco de privacidad mientras comes.
Repetiremos seguro probamos el cordero la próxima será cochinillo.
Un restaurante fabuloso para comer o cenar. No dejéis de probar las croquetas de jamón, las zamburiñas y el salmón marinado. La atención al cliente, de 10. Volveremos.
Muy bien la comida. Un poco cara pero de calidad (también eran fechas navideñas). Un poco despistados los camareros ya que decían que los menús de la página web no los aplican porque tienen problemas con la web? Costó, pero finalmente si nos aplicaron el menú degustación aunque con alguna variación. El lugar grande y acogedor.
Estamos hoy comiendo, habíamos hecho reserva y no nos tenían apuntados.pero sin problema nos han asignado mesa, hace tiempo que no venimos y he de decir que la comida y atención muy buena pero es como ir a comer al polo norte! Toda la comida muertos de frío al principio pensé que era la puerta que teníamos al lado que entraba frío pero ha sido levantarnos para ir al baño y dios! Nos hemos encontrado con pingüinos por el camino y el baño un iglú, para lo bien que cobran la comida un poquito de calefacción no les vendría mal. Ya lo del parquink lleno de Hoyos y barro y la puerta de entrada que es como la del pasaje del terror esto ya lo dejamos para otro día. No volveremos, no hay nada peor como comer con frío.
Excelente atención combinada con la mejor calidad. Buen ambiente. Asados para llevar. Extensa carta de vinos de variadas denominaciones. Parking privado. Cochinillo. Chuletón de Ávila. Atún. El arroz con liebre espectacular.
El pasado sábado estuvimos comiendo en este restaurante y a no ser que quieras invertir unas cuatro horas en la comida no es muy aconsejable al menos en días señalados como en el día del Padre. Pedimos en primer lugar los entrantes, que en total fueron 3, no solo tardaron bastante tiempo en servirlos, por ejemplo, entre el segundo y tercer entrante tardaron unos 30 minutos, pero además este tercer entrante que constaba de unas alcachofas venía totalmente frío. El plato principal constaba de unos cuartos de cordero que ya habíamos reservado con antelación al día de la comida, pues entre el último entrante y el principal estuvimos esperando cerca de 1 hora, eso sí, la digestión entre platos estaba asegurada, y el asado estaba salado y muy pasado. Por último, los postres, aquí nos tocó esperar otra media hora para que los sirvieran, en fin, lo comentado, si decidís ir a comer a este restaurante al menos en alguna fecha señalada tendréis que armaros de paciencia, por lo menos por nuestra experiencia, ya que ha sido la segunda vez que nos pasa.