La Casa de Mónico, Madrid
Direccion | C. de Cabeza de Manzaneda, 105, Madrid | ||||||||||||
Telefono | +34 913 57 32 55 | ||||||||||||
Horas |
|
||||||||||||
Sitio web | grupomonico.com | ||||||||||||
Categories | Empresa de organización de eventos, Sala de banquetes, Organizador de bodas, Salón de bodas | ||||||||||||
Clasificacion | 4.2 5 opiniones | ||||||||||||
Empresas similares cercanas VenuesPlace - Espacios para eventos Madrid — Av. de la Galaxia, 29, Madrid eNubes — C. de Basauri, 17, Madrid |
La Casa de Mónico opiniones
5Celebramos nuestro boda allí y todo excepcional. Destacar la atención de nuestra comercial (Teresa) durante todo el año de preparación y de la otra comercial (Gemma) durante la semana previa. El día de la boda salió todo perfecto, todos los encargados pendientes constantemente de lo que se necesitaba y de colaborar para que fuera un día inolvidable, como fue. La comida maravillosa, abundancia y calidad. Sin duda, un clásico de bodas más que recomendable. Una vez más, gracias
Un lugar espectacular y muy bonito para celebrar cualquier acontecimiento importante.
El entorno y las instalaciones son una maravilla, con árboles espectaculares, un salón central muy bien decorado y la casa con una bonita construcción e iluminación. Sin embargo, no fue lo más adecuado para una celebración de casi 250 personas, pues los espacios empleados eran muy pequeños para tanta gente e incómodo para personas más mayores que ni siquiera podían encontrar un sitio para sentarse en la terraza a la sombra, durante casi dos horas.
A pesar de que el menú era muy atractivo, la calidad final del almuerzo fue menor de lo esperado, preparación mala, postre mal presentado, opciones de cambio (pescado en vez de la carne) lamentables.
No cumplió expectativas.
Gracias al personal, muy atento y amables, aunque caótico el servicio, sin dar respuesta a lo que se pedía.
Quien quiso bailar después del almuerzo, lo tuvo que hacer para un espacio en el que cabrían 50 personas y apretadas. Sonido insoportable, inconcebible que se hiciera en ese espacio tan reducido.
¿Parece que todo vale?
Deben prestar atención a varias cosas. Por ejemplo, las avispas, que nos amargaron el cóctel. La temperatura de cervezas y vino blanco: al minuto de coger las copas ya no estaban suficientemente frías. Ios pinchos: demasiada masa. El ruido del comedor: había que hablar a voces, con el riesgo de estropearte la garganta o, peor, contagiar (te) el covid. En su descargo. La ola de calor.
Vuelvo el 24 de septiembre. A ver si hay más suerte.