La Cocina Bar, Madrid

Nuestro grupo organizó un concierto en este local en septiembre. La zona del público es amplia, el escenario es cómodo y la sala está muy bien equipada. Destaca el técnico de sonido, Gonzalo, que fue muy comprensivo a nuestros horarios y muy atento durante la prueba de sonido. Logró que todo sonase perfecto y la experiencia fue muy buena.

No lo recomiendo. Como músico: Tuve un concierto en su local hace más de un mes y es la fecha y no pagan. Y como cliente: Hay bien ambiente pero es bastante caro.

Nueva gestión a partir de la nueva temporada, sonido y trato de 10 a las bandas y buenas condiciones.

Un grupo de amigos dieron un concierto. El dinero de la entrada era para ellos. Pues después de reclamar el pago unas cuantas veces, el gerente, dueño, encargado o lo que sea, se está haciendo el loco, no coge el telefono.y no les pagan. Así da gusto. Músicos gratis. ¡¡¡Lamentable.

Es un vergüenza! NO PAGAN A LOS MÚSICOS. Hace mes y medio tocaron unos amigos y aún no han cobrado. Pongo una estrella porque si no no me da opción a publicar, pero no merece ni una estrella

Fuimos a un evento y estábamos en la parte baja. Las bebidas caras y malas. No había comida, la musica/dj regulero, la parte de arriba oscura y deprimente porque nunca encendieron los neones o luces.

El sonido es terrible y si hay concierto se les va la pinza y te cobran tres veces el precio normal de las cervezas y las copas.

Sitio horrible. Los de la entrada son racistas, nos vacilan por ser rumanas y no dejan libertad de expresion. Super agresivos, insultan y discriminan.

Soy extrabajador de la discoteca y habiendo trabajado allí hace un año sigo sin recibir mi último sueldo, no contestan a mis mensajes. Con mi trabajo mantengo a mis dos hijos pequeños pero a esta empresa le dio igual mis necesidades y/o derechos.

Estuvo muy bien, vengo aquí a ver si encuentro a una chica que iba de verde ayer viernes 10 de marzo. La perdí y me encantaba. Si me lee, Dios existe.

No recomiendo este sitio, a mi parecer son mal educados y te engañan haciendote salir al finalizar el concierto y diciéndote que luego te dejan entrar de nuevo, a la hora de dejarte entrar te vuelven a cobrar, una estafa en toda regla.

El trato fue nefasto. Fuimos a un concierto y nos hicieron salir y luego mi hijo no pudo entrar por llevar una sudadera de Nike. Inconcebible.
Las copas eran caras y de garrafón. No he probado un ron más malo.en.mi vida.
Inclusive al cantante del concierto no le dejaron entrar después por ir con una cazadora de piel nirmal. Una pena porque el concierto estuvo genial.

Realmente indignado con el trato de la sala y su falta de organización. Pagando 7€ la entrada del concierto (sin consumición ni nada) luego nos echan y no dejan entrar a la mayoría que habíamos estado disfrutando del increible concierto de Javier Sánchez.
Te tomas una copa titubeando por los precios y la mala calidad. El espacio es una ratonera que llenan sin capacidad alguna. Los porteros groseros, maleducados y faltando el respeto a todo el mundo. Hasta un niño de 18 años que venía con su familia se tuvo que desvestir con el frío que hacía para que le dejarán entrar a regañadientes porque la madre no paro de insistir que era para tomarse una copa y ya está. De verdad que una situación muy vergonzosa por parte de la sala.

Te cobran la copa en la entrada y luego tienen un camarero por barra que tarda mucho por servirte. 15€ la copa.

Nuestro grupo JOTAPOLS dimos un concierto este sábado 19 y una pasada, muy buen sonido, excelente trato de todos los miembros del servicio y del dueño. Ambientazo y una sala espectacular para dar conciertos.

He ido hoy día 18 de noviembre, Javi y su grupo han sonado de locos, pero me parece una vergüenza que sigamos dejándonos llevar por las apariencias, llevo dos pendientes y a todos los que llevábamos pendientes nos hacían quitarnoslos, las cañas a 5 euros los chupitos a 5, pero lo peor es que te hagan quitarte los pendientes, penoso y retrógrado

Me lo pasé muy bien, pero descontento con el precio y un portero, 25€ dos copas y el local es enano. El portero era un chulo vacilón, que por nada te amenazaba, a mi amigo le cogió mania y por poco no le dejó pasar, yo me quedé flipando.

Pagamos 120 euros por un reservado y nos metieron un grupo de 15 personas dentro porque “eran amigos del jefe” obviamente dejó de ser un reservado. Un antro sucio, pequeño y el aforo parecía estar muy por encima del permitido. Cuando hablas con el personal para solucionar el problema te tratan mal, te insultan y dicen que quieres poner una hoja de reclamaciones porque estás borracho.

En el cartel no pone nada y nos han echado a 20 personas porque dicen que son menores de 20 años, lamentable

El alcohol es muy malo, me tomé 2 copas por 25 euros y.dolor de estómago brutal.
Nada recomendable.