La Lonjería, Madrid

Hemos comido al lado de unos ascensores, pasando frío porque no había más estufas, en una zona abierta y sin acondicionar. El servicio muy lento, y la comida muy muy escasa. Todo por 65 euros con una copa. No volveré, muy decepcionante.

Nosotros es la segunda vez que vamos y la verdad que regulín regular. Para el producto que tienen, que es maravilloso, creo que en cocina no se organizan bien. Pedimos bienmesabe, berberechos y calamar plancha. El bienmesabe muy rico, pero super hecho, una pena. Los berberechos buen tamaño pero mal cocidos, cómo se pueden cocer mal unos berberechos?
Y el calamar nunca llegó. En fin una pena.
Le daremos otra oportunidad, pero.

Parece mentira lo que puedes encontrar en los sitios más recónditos
Escondido entre oficinas y concedionarios de coches encuentras una maravilla de restaurante. Especializado en pescados y mariscos, con conservas premium y una carta de vinos alucinante.
Servicio profesional y rápido. Calidad superior.
Después el cubata te lo puedes tomar en la terraza mientras pincha un DJ.

LAMENTABLE. INFAME. HORROROSO. Imposible entender la infundada fama de ese local. Tardaron más de media hora en traernos el vino. Con los entrantes tardaron sólo veinte minutos y vinieron dos a la vez, uno de ellos, zamburiñas, frío y sin sabor. Chipriones plancha, sin sabor. Pescado bastante bueno, por el que tuvimos que esperar otros 15 minutos. Chuletón sin sabor. Para olvidar. Sitio al que no volveré y jamás recomendaré

La comida bien, el precio, bien, el servicio deja mucho que desear. Comes marisco y no traen servilletas húmedas para limpiarte, diciendo que no tienen. En su defecto un vol con agua y un trocito de limón? Tampoco. Nos dicen que nos quedemos con el cubierto. Luego nos dicen que se lo llevan porque teníamos un segundo. Pedimos agua y nos traen un solo vaso siendo dos. Un 10% mas por comer en terraza? Que es como una especie de entrada a una nave. Y que están pasando con pales de mercancías por el medio. Las mesas sin un triste mantel, aunque fuese de papel. Mucho que aprender de restauracion.

Las navajas maravillosas. Las nécoras estaban unas muy buenas y otras sosas, además faltaba una pinza. El servicio es amable, pero tardan bastante en atender

Buena calidad.pero para ser una zona industrial.muy caro.demasiado no es competitivo con restaurantes de zona centro y de igual calidad.

La primera vez que llegamos a este lugar y tuvimos un día maravilloso. Pescado muy fresco y bueno. Mariscos deliciosos. Lo recomiendo sin dudarlo. Un pequeño lugar agradable, muy bien ubicado para aquellos a quienes no les gusta estar en la costa o demasiado en coche. Para disfrutar aquí, recomendamos una reserva por adelantado.

Raciones, pescados frescos y marisco de primera. Para comer, cañear o hacer alguna celebración.

Buenísimo el pulpo y detallazo de Luis por darle a nuestra pequeña esas croquetas tan curiosas. Lonjería nunca defrauda.

Parece que, pero no llega.
Reservamos en el nuevo comedor que han abierto pero nos metieron en el antiguo que es un local menos bonito. Mantuvimos la mesa porque los que llegaron primero no lo sabían y ya estaban utilizando el servicio.
El personal de comedor pseudo profesional que lo intenta pero no llega. Bastantes fallos de servicio.
La comida toda buena especialmente los pescados y mariscos, aunque las raciones justas. Los postres muy ricos.
La carne que pedimos la sirvieron muy fría y la única solución fue pasarla por horno. La calentó pero redujo a la mitad su tamaño y su sabor porque se hizo demasiado. Según la camarera la culpa fue nuestra por no pedir con más antelación la carne: (Ya lo sabemos para la siguiente.
Después de una cuenta abultada, las llamadas de atención por el servicio y el fallo de la carne, ni una simple disculpa (lógico, porque la culpa fue nuestra al fin y al cabo)
Sitio peculiar por su ubicación, pero bastante pretencioso por lo vivido en esta experiencia.

Distribución del espacio algo caótica. Se trata de varios locales entre los que hay césped artificial y mesas. El servicio es rápido y la calidad muy buena. El precio (hablamos de Madrid), ajustado. La carta de vinos da envidia, con bastantes entradas nacionales y no pocas internacionales. Única pega: es ruidoso porque se pone de bote en bote.

Muy buen género Tratado de manera sencilla pero eficaz.
Trato muy agradable, agradecidos a la sumiller por su simpatía y ayuda a la hora de elegir entre muchos manjares.
Fácil aparcamiento.
Sitio recurrente para repetir

Súper rico, con todos los productos de primerísima calidad y servicio muy bueno. Recomendable al 100%. Ahh y cava de puros.

E de decir que la comida y calidad es excelente pero el servicio un poco escaso.no puedes tener una evento de 50 personas y querer atender al resto de gente.por qué se atiende tarde y mal. Y creo que pagas bastante bien la calidad y el servicio.y por lo que veo la mesa más próxima está en las mismas.

Decepción total en la última visita.

Hemos ido en varias ocasiones y la relación calidad/precio es aceptable, pero en la última visita fue un desastre absoluto.

El trato bien como siempre y los entrantes bastante correctos.
El problema lo tuvimos con los arroces. El arroz del señoret era una pasta amarilla, completamente pasado e incomible que dejamos al completo. También pedimos uno con bogavante y tremendamente salado y también fuera de punto.

De momento les castigaremos una temporada sin volver y espero que fuera sólo un mal día del cocinero.

Pongo 2 estrellas por el buen trato recibido por los camareros, pero por la comida no se merecen ninguna.

Hemos ido un par de veces y la verdad q la atención no es precisamente por lo que hemos vuelto, poco profesional y lento, a veces mejor contratar menos y más cualificado. El género es bueno y el precio ajustado por eso le dimos otra oportunidad

Cenar, 2 personas (croquetas, pulpo a la gallega, coquinas y Zamburiñas) unos 70 euros aproximadamente. Comida muuuy pero que muuuy buena.todo con sabor! El trato de las 2 chicas que están en salón fue perfecto! Sitio escondido pero con encanto Especial. Recomendamos 100% y por supuesto volveremos.

Hay varios ambientes, algunos más bonitos que otros pero en TODOS se come de lujo. Lo mejor es dejarse aconsejar. Muy buena carta de vinos. Carta completa con gran calidad. Y el trato inmejorable.

Está un poco escondido pero cuando llegas es un oasis!

Me invitaron a comer unos clientes. Ni fu ni fa. A la plancha el marisco. Vale. Pero cocido. Buen marisco, mal elaborado. Si no, que le pregunten a los percebes. Pasados de cocción. Nos quejamos y nos pusieron otros, pero estaban igual