La Pastelería del Duque, Madrid

Una de mis cafeterías preferidas, el sitio muy comfy y el trato de las chicas es excelente, la tarta de oreo sin duda la mejor.

Exelente cafetería! Ideal para desayunar y merendar! Todo riquísimo y las chicas que atienden son un amor! Recomendadísimo!

Se rompió una taza de cafe soltandose el mango encima nuestra, no nos pusieron otra, y ademas intentaron cobrarnosla

Gran desayuno, variada opción apta para veganos, que también puede ser sin lactosa, sin gluten o sin azúcar. Batidos, tartas, variada selección de tés y cafés.

Preciosa cafetería, llena de lugareños para que sepas que es buena. Los pasteles y pasteles son deliciosos: una excelente parada para tomar un refrigerio.

Aunque los bizcochos están ricos, no repetiríamos la experiencia por la falta de higiene en vasos.
El pasado domingo por la tarde fuimos a merendar y la camarera que parecía ser de mayor experiencia nos puso los vasos que apenas acaba de meter sucios al lavavajillas de otros clientes. Fue una experiencia un poco desagradable: (

Fuimos a merendar, entramos de casualidad y fue un acierto. Puntos positivos: precios, sabor de las tartas, variedad (veganas, de cerveza, budines, etc) y el tamaño del cafe, nunca vi algo igual. Pedimos el mas grande y era enorme. Estaba muy rico. Pedimos también carrot cake vegan y tarta de limon, calabacin y jengibre. Muy original y ricos sabores. Punto a mejorar, la chica que atendía estaba sola, el sitio lleno y tuvimos que recoger las cosas de la mesa y limpiarla nosotros. Por 2 cafes enormes y 2 tartas deliciosas pagamos 12,80€. Volveremos y super recomiendo.

Me pidieron que abandonara la mesa porque la persona que compraba antes que yo no tenía dónde sentarse, aunque también había gente haciendo cola en las mesas vecinas, y el argumento de que yo era el siguiente en la cola no sirvió de nada. Fue la primera vez en muchas ciudades europeas que me encontré con una situación así.

Es un sitio pequeño y encantador con una oferta de bizcochos artesanales genial! Volveré para probarlos todos.

La pastelería del Duque es para mí, una de las mejores cafeterías del centro de Madrid. Llevo muchos años frecuentado el lugar y el producto siempre es bueno y casero (apto para veganos, o personas con intolerancias) El precio de sus desayunos ya no se encuentra en casi ningún sitio. No obstante, las veces que he ido con el ordenador, ya sea con compañeras o para hacer algo de trabajo, su respuesta ha sido poco cordial: que durante el desayuno no se puede, que sólo puedes ponerte en una mesa (al lado del baño), que sólo durante 40 minutos y más cosas así. NADA de esto, a excepción de las mesas, estaba indicado o avisado por el personal. Y yo lo entiendo. Pero honestamente la solución sería prohibir el uso de ordenadores al completo y no establecer normas que no tienen sentido, porque si ya me has cobrado el desayuno, y estoy a la mitad no puedes echarme porque quedan 15 minutos del horario de desayuno y no se puede utilizar el ordenador. Al final me parece aprovecharse y crear mucha tensión y mal rollo.
En conclusión, no quieren gente con ordenadores.

La chica super majisima y los desayunos riquisimos, un lugar muy mono y con vistas a la calle. Ideal para desayunar, camarera muy muy muy amable!

Pequeña y encantadora cafetería con buenas tostadas, pasteles, jugo de fruta fresca. Acogedor entre los lugareños.

Domingo 12: 00 del medio día. La calle y alrededores repletos de gente por El Rastro. Aquí la hora del café. Local lleno y una cola que llega hasta la calle. Una sola persona atendiendo, sin parar e intentando ser amable. Ésto es para el/los propietario/s. Me parece increíble que en un día con tanta gente, algo absolutamente previsible, no se solucione el problema con más personal. Por cierto.la gente en la cola está comentando la profesionalidad de la camarera. Impecable

El personal muy desagradable. Deben recordar que el cliente es lo primero, y en ningún caso hablarle mal. No lo recomiendo PARA NADA.

La chica que me atendió es antipática, además no te sirven a la mesa. No dejan usar portátiles. Mi idea era trabajar un poco mientras me tomaba un café pero no fue posible. No lo recomiendo.