La Tasquita de Enfrente, Madrid

Wanted to go several times but couldn’t get booking, I made call just 30 min before show up and got 1. But the experience was very disappointing:

- Oyster over clean and let them without flavor.
- “Ensaladilla” without any flavor and hot.
- Praws ok.
- “Boquerones” without flavor and egg not well cook.
- “Albondigas” was a joke.

- Wines selection very weak.
- Waitress running around for take the plates but not aware when you ask something.

Even the owner ask me about the dinner and I tell some comments about the temperature but he didn’t take it well.

Never will come back and I don’t recommend any person in fine dinning

Experiencia gastronómica impecable. Lo tradicional puesto en valor. Gran calidad de los productos. Menú muy recomendable. Acústica regular pero merece mucho la pena. La ensaladilla y las navajas top

Una muy buena experiencia, ideal para una celebración especial. Antes que nada, hay una camarera majisima que se llama María que es un encanto de persona y que es una gran profesional.
La comida espectacular, la ensaladilla lo único que cambiaría sería la temperatura. RECOMIENDO 100% las albóndigas, los boquerones y la breva!
Volveremos a probar los callos.

En resumen, la cantidad de los platos no se ajusta para nada en su precio. La calidad del producto nos gustó mucho, notable, y el servicio muy bueno, pero el desajuste en la cantidad con el precio nos llevó a irnos con un sabor de boca agridulce. Pedimos de cenar:

Chipirón de Potera: Impresionante su sabor. Escaso como todos los platos, pero mereció la pena. Imprescindible pedir.

La albóndiga: Brutal todo.sus patatas, el sabor de la carne y la salsa, pero es el primer plato que se me quedo escaso. (2 albóndigas x persona la ración completa)

Ventresca de Bonito: 35€ de un pescado muy muy grasiento. Escaso como todo lo del restaurante pero ni la calidad acompañó esta vez.

Salpicón de langostinos: Vinagreta muy muy rica, y la calidad como en el 80% de los platos muy alta. Nos gusto mucho.

Huevos con boquerones: 26€ de 5 boquerones y un huevo frito. No estaba malo, pero la relación cantidad/precio se dispara. No merece la pena.

Pannacota de queso con miel: Lo único bueno la miel. 10€ de postre, que no tiene absolutamente ningún sabor.

En definitiva, nos vamos con sabor agridulce, aunque algún plato nos lleno en todos los sentidos. Resaltar que el servicio fue de 10 de todo el personal y el sitio nos gustó, estuvimos muy agusto.

Precio x persona: 90€ (sin vino)
Valoración: 6/10

Claro ejemplo de menos es más. Muy buena hosteleria, producto y servicio. Me quito el sombrero.

Me encantó la tasquita. Muy buen servicio en un local pequeño y acogedor. Para beber me dejé aconsejar por la sumiller y acertó con las tres cops de blanco: godello, albariño y txakoli.
Fui con el menú degustación de 100€ más los vinos, 122,5€ en total.
Consiste en:
- Ensaladilla rusa: bien
- Angula ahumada: increíble
- Tomate con queso azul y huevas: increíble la combinación
- Cardo: muy bueno
- Setas en caldo de calabaza: muy bueno
- Boquerones en tempura: increíbles
- Sepia: muy buena
- Albóndiga en salsa de cocido: muy buena
- Torrija: el postre estaba bueno aunque la ejecución podia mejorar, ya que se quedó algo seca

Teníamos ganas de probar este sitio y nos ha decepcionado. Es un sitio que podríamos definir como un quiero y no puedo. La cocina es mediocre, tanto el producto como la manera de cocinarlo. El servicio no es amable, el mobiliario y la vajilla no están a la altura de un restaurante con menú degustación de 100 euros.
Nos encantaría haber tenido una experiencia distinta pero desafortunadamente no podemos recomendarlo.

Ya lo he dicho en otra ocasión. Esto es un sitio obligatorio para visitar en Madrid. Recomiendo reservar con anterioridad y así evitar disgustos. La comida, el servicio y el ambiente son perfectos. Muy atentos y dispuestos a atender con calidad de servicio.

Si tienes presupuesto, no lo dudes. Es uno de esos restaurantes que según los más exigentes gastrónomos tendría que tener estrella Michelin. Gracias a no tenerla, baja la probabilidad de encontrar gente esnob o nuevos ricos.
Nosotros somos de presupuesto comedido, así que fuimos a tomar solo su exquisito e inigualable carabinero. Una experiencia superior, de saltársete las lágrimas.

Sin duda la comida muy rica, un lugar acogedor y agradable, la atención es única e inmejorable. Lo recomiendo 100x100.

Una barbaridad para los sentidos.
Gracias por todo equipo.
Nos va a costar superar esta experiencia.
10 sobre 10

Experiencia culinaria. Vale la pena pedir el menú degustación. La cocina es exquisita, así como el servicio. Un restaurante q se paga pero q lo vale.

Comida deliciosa en un local poco cómodo. Curiosa la escasa carta de vinos, creo que es un punto importante a mejorar. Por lo demás, muy bien.

Materia prima excepcional, servicio excelente, precios a tono con la gran calidad de los platos, de apariencia sencilla pero de una enjundia notable. El dueño y cocinero, atiende con profesionalidad cualquier consulta. Un tesoro oculto entre pequeñas calles cerca de la Gran Vía de Madrid.

Describing La Tasquita de Enfrente as “a conversation that never took place with my father” Chef Juan José López Bedmar sets out to create dishes built on memory and heritage, his love of the kitchen rekindled after decades in another business.

Raised by the man who ran La Tasquita for thirty years, and now joined by Chef Nacho Trujillo at the stove, it is at Calle de la Ballesta 6 that diners will find an intimate dining room lined in photos, service quaint but friendly while the menu focuses on carefully chosen unique ingredients prepared simply.

Under the radar despite its strong local following, a €90 tasting menu offered versus a la carte choices, it was with Wine poured that housemade Bread arrived alongside three cleaned and trimmed Oysters with astute minerality and lingering sweetness.

Rooted in Spanish heritage despite Bedmar’s extensive travels, grilled Fig and a sliced Anchovy melding elegantly on the tongue, La Tasquita’s Spanish Potato Salad reportedly comes from father Serafín López’s original recipe while Langoustines in a Sauce of their Shells are delightful.

Letting Razor Clams speak for themselves unadulterated in Olive Oil, and then cleansing the palate with a peeled Tomato intended to be mashed into herbaceous Water, wild Broccoli next arrives bitter and crisp atop a fried Egg that mellows both taste and texture.

Established with Madrid’s best suppliers, Squid and Caramelized Onions better than the sum of its parts, Meatballs proved a slight letdown as they were a bit overworked, though this was quickly forgotten thanks to “False Torrejas” that straddles a fine line between Flan and French Toast with subtle egginess and lots of Cinnamon.

Creo que vamos a empezar a destacar por su cocina, producto y más producto, calidad junto de la mano de una gran cocina, gracias a Juanjo y a Nacho por la comida de hoy.
Hemos pedido el menú degustación, para hacernos una idea de lo que se trabaja en este local. Hemos quedado enamorados.
La atención muy buena.

De verdad da gusto comer así.

Muchas gracias a Juanjo, Nacho y al resto del personal por el trato recibido. Uno de los buques insignia de la gastronomía madrileña sin duda alguna. Chapeaú.

Experiencia muy agradable. Juanjo y el resto del equipo están muy atentos. Nosotros pedimos menu degustación por ser la primera ver y fue todo un acierto. Muy destacable el salpicón y las albondigas. Bodega MUY amplia. Volveremos seguro.

La verdad es que el trato es excepcional, en un ambiente súper agradable y todo muy rico y con un toque personal especial. Por algo se ha convertido en un clásico madrileño. Muy recomendable. Todo fantástico, una ensaladilla y unas albóndigas de premio.manteniendo la tradición.y a la vez muy diferentes.espectacular.

Restaurante acogedor, con un servicio siempre atento y una carta espectacular con una materia prima de primera. Un sitio para volver!