MajareTa, Madrid

Uno de mis sitios favoritos en La Latina.
En mi primera visita, fuimos un grupo grande por lo que pedimos probar muchos platos y todo estaba tremendo.
El carpaccio de champiñón con pesto, los huevos rotos, las croquetas y la tarta de queso estaban tremendos.

Lugar con mucha magia y encanto.
Un trato distendido pero muy profesional.
Da gusto sitios como este en los que te sientes tan agusto y puedes disfrutar de una comida excelente. Sin duda una lugar donde volver mucha más veces!

Deseando volver. Desde Sevilla con todo nuestro cariño. Excelente calidad (la carne una pasada) y atención sobresaliente. Ya nos queda menos para la próxima

En Majareta te sientes como en casa. Lugar acogedor, lugar cálido tanto por la decoración como por el buen trato.
Y la comida!

5 estrellas se queda corto. Si pudiese darle 6 se las daría. Estábamos buscando un sitio para tomar una copa a la 1 un viernes por la Latina y lo único que encontramos fue rechazo y puertas cerradas en nuestra cara como María en Belén. Hasta que nos cruzamos con el dueño de MajareTa y nos invitó a entrar que nos servía una copa pese a estar celebrando un evento privado con sus amigos. Los dueños fueron súper agradables y hasta nos ofrecieron un poco de tarta. Da gusto ir a sitios con gente así, sin duda repetiré.

Genial, fuimos a cenar allí sin reserva un grupo de amigos y enseguida nos sentaron en una mesa. Raciones abundantes tiradas de precio, y de muy buena calidad. Las dos chicas que nos atendieron fueron súper majas. Volveré sin duda!

Se come estupendamente. El personal es súper agradable, simpático y servicial. Las croquetas están increíbles (algo pequeñas, por lo que me comería 3 o 4 raciones por lo menos). Es cierto que no es una carta muy extensa, pero lo que tienen está delicioso. Sin duda volveré.

Restaurante castizo en barrio La Latina con tres zonas de comida a diferente nivel.
La primera zona de barra y salón con 4-5 mesas para unos 20 comensales. Decoración retro-pop años 80 con mmu buen gusto.
Otra sala bajando unas escaleras tipo reservado para unas 10-12 personas.
Y la última llamada chill out con una pequeña barra y sala para unos 25-30 personas.

Fuimos dos personas con reserva previa, recibimiento muy cordial nos ofrecen una mesa alta puesto que los comensales anteriores no han acabado. Aceptamos tomar algo mientras esperamos.
Nos preparan las mesas y pedimos dos de los platos más conocidos como son los huevos rotos con alcachofas y las albóndigas con salsa de mostaza y miel. También pedimos una ensalada con pollo escabechado.
Raciones muy abundantes y exquisitas.
Las albóndigas con muy buen aliño de carne, casi sobra la salsa.
La ensalada muy sabrosa con el acompañamiento de una vinagreta de salsa al pesto y lo que más nos gustó fuero los huevos rotos, no dejamos nada.

De postre no le quedaban muchos, nos obsequiaron con una tarta de queso casera que ya fue el cierre sublime para esa cena.

Buen sitio para cenar y salir satisfecho.

Es un sitio genial para estar, hablar, beber, comer, y en ese bar restaurante, confluye todo tipo de arte y gente artista que Manuel y su entorno ayuda a atraer. La energía de ese sitio es especial.

Nosotros fuimos a cenar y estaba riquísima la comida y a muy buen precio. Recomendable los huevos rotos con alcachofas!

Me ha encantado Majareta! Me ha parecido un lugar con mucho encanto situado en una de las zonas más auténticas de Madrid. Hemos disfrutado de unos riquísimos platos y de un magnífico servicio. Muy recomendable!

Generosas raciones en un restaurante que es mucho mas por dentro de lo que aparenta por fuera. Buena atencion.

Uno de los mejores restaurantes (por no decir mi favorito) por excelencia en pleno casco historico de la Comunidad de Madrid. Atencion exquisita, comida, mejor aun y precios muy asequibles, todo ello en un ambiente tipico madrileño, que solo puedes encontrarlo en los restaurantes mas castizos de la capital.

Bravo! Sin duda, volvere a repetir.

Un lugar alegre, relajante y donde la atención por parte del dueño es inmejorable, te hace sentir como en casa, la comida bastante buena.

Todo buenísimo! El trato muy cercano, pero respetando la distancia de Seguridad. Un lugar bonito y acogerdor en pleno centro

Un lugar excelente a resguardo del bullicio de la Latina donde comer muy muy bien y sentirte como en casa. Todo muy rico y la atención del dueño, genial! Recomendado 100% y eso que dimos con el sitio de casualidad!

Nos cobraron 8.50 € una ración de croquetas que parecía media y nos trajeron los platos cuando ya habíamos terminado de comer. No volvería. Mala atención, mala calidad.

Una experiència fantàstica en aquest bonic lloc. Propietari (crec) va esclatar amb el concert improvisat en els graons de tocar la guitarra i una jove (amic?) Jugant un tambor de caixa. Va ser un gran temps amb el menjar!

Fantástico, los dueños encantadores, Manu toca la guitarra y canta de maravilla. Pasamos un rato estupendo y para la próxima me ha dicho que practicará "Ojalá". A ver. Muy recomendable, se come muy bien y muy divertido

Un sitio encantador, una comida exquisita y un espacio con grandes ventanas para estos días que estamos pasando