Mesón Gallego San Blas, Madrid

Siempre los mejores calidad, atención, cantidad. Una vez más y como siempre salimos encantados

Servicio pésimo.
Domingo a medio día un camarero, que se entera poco por cierto, para toda la terraza.
No se parece en nada a como era antes.
No volvere

La relación calidad precio es inmejorable. Pedimos pulpo y lacón y estaban buenísimos. La atención del personal estupenda.

Hace unos años daba gusto venir aqui, pero ha día de hoy, no lo recomiendo, el servicio es muy lento.
Mi marido y mi hijo se han tomado su bebida casi antes de que me trajeran la mia, si no llamas tú al camarero ni te atiende ni limpia la mesa. Una pena, por qué nos gustaba mucho.

Desde que se marcharon las tres camareras este bar lo ha perdí todo, los de ahora ni se enteran, y la chica rellenita es una mal educada. Vais acabar cerrando

Problamete la ración con menos cantidad que me he comido en mi vida. Era habitual mi presencia en dicho local pero creo que han cambiado de dueños y las restricciones por parte de los nuevos propietarios es una realidad. La ración de alitas son tres unidades divididas en un plato alargado. Las bravas son patatas pequeñas con salsa bañadas en tabasco puro y duro. El cocinero es un asiduo a la freidora industrial. Como reseña positiva la simpatía de la camarera.

La relación comida y precio es estupenda, los camareros son muy agradables, no tardan en servir y encima suele haber ambiente, me gusta mucho ir con la familia por eso

Antiguamente si podia decir que era un Restaurante gallego por su comida sus camareros y su ambiente, pero ahora no tiene nada que ver a un restaurante gallego, los camareros no se enteran de nada y la comida no tiene nada de gallega luego los precios últimamente a subido una barbaridad más de el doble de lo que costaba antes sinceramente no lo recomiendo

La comida es buena, a veces encargo codillos y muy ricos, en general todo está bien, y está muy limpio.

Mesón de toda la vida con una calidad espectacular. A destacar el caldo gallego que resucita a los muertos y el codillo. 100% recomendable.

La comida si bien no está mal y precios asequibles. El pan es buenísimo más en Madrid. Es un bar regentado por gente no gallega lo cual pierde esa esencia del nombre del local. Todo reformado y muy limpio.

Inolvidable! Celebramos el cumpleaños del Gafas ahí. Pensábamos que no se iba a tirar el rollo invitándonos y al final fue así. Nos lo tuvimos que pagar nosotros, cada uno lo que consumió y ahí nos dimos cuenta de que era bastante económico y de que el Gafas era un agarrao de narices. Para la próxima se va enterar

Terraza, comida buenísima, precios adecuados y trato cercano. Recomiendo la oreja, ¡buenísima!
Si tienes una abuela gallega, no notarás la diferencia entre su cocina y ésta. ¡Riquísimo todo!

Hemos cenado 3 personas una ración de bravas y una oreja a la plancha con 3 cervezas 24 euros.la comida rica pero la bebida un poco cara, la caña 1,70 y la jarrarrita 3,10.