Mesón La Alfarería, Madrid

Es un restaurante no muy grande pero su cocina vale oro, la comida está buenísima y el trato es maravilloso, hemos ido a comer aquí muchas veces y siempre salíamos contentos por su comida y el trato al publico!

Hemos ido a posta para probar los calameres que nos habian recomendado y en efecto es de los mejores sitios en madrid para probar calamares muy muy ricos y bien cocinados, ademas despues pedimos menu y todo cociona hogareña super bien cocinado y muy bueno de sabor.recomendable 100×100, es un sitio pequeño pero no os engañeis la cocina es buenisima!

Menú del día muy bueno a 12,75€ con café y postre. El cocido está espectacular. Muy recomendable

Le pongo 4 y no 5 por el precio.
3€ una tostada de tomate y un vaso de leche.
Pero muy buen servicio.

Fenomenal como siempre. Comimos de menú y estaba todo muy bueno, casero.
Si vas a merendar, pide papas, riquísimas. Todo fenomenal!
La atención y el servicio fantástico.
Un sitio del barrio desde hace muchos años.

Bar de toda la vida, donde te atienden de maravilla y rápido. Recomiendo las migas, los papaviejos y la ensaladilla. El personal es muy amable. Relación calidad-precio excelente. Ideal para desayunar, comer, merendar o cenar. Yo repito.

De toda la vida en el barrio, yo ya de pequeño iba a merendar "" papaviejos" y los desayunos con pan, tomate, ajo y aceite de lo mejor.

Buena terraza.
6'50: copa de ribera y migas (miércoles y sábado)
Bien hechas con huevo para mojar.

Fuimos y nos decidimos por las tapas. Ambiente y trato amable, precio caro para la calidad de ciertas tapas elaboradas con producto congelado y precio de producto fresco. Salvando eso, lo demàs correcto.

Muy amables y serviciales. Imprescindible desayunar o merendar con sus famosos papaviejos, una especie de buñuelo frito creado por ellos.

Sitio sencillo, de toda la vida, con buenas raciones. Lo que más me gusta sin duda es ir a tomar el desayuno con mi madre y tomarme unos papaviejos.

¡Menudo servicio y atención! Excelentes. El mesonero super amable, ofrecido y atento. El cocinero atendió mi petición e incluso se ofreció a mejorar el plato solicitado al gusto. La mesa limpísima. Me ha encantado. ¡Volveré!

Limpio y cumpliendo actualmente las normas covic y la atención maravillosa de parte de los islas empleadas os vale de ir y conocerlo cheberuco bacano son unos profesionales

Si vas a Moratalaz, es IMPRESCINDIBLE ir aquí a comer unas raciones. Primero, el camarero es excepcional en servicio y rapidez. La comida es casera, la de toda la vida; recomiendo los huevos rotos y la tarta de dulce de leche. El cubata presentado de manera muy original. Y la noche termina con un precio de 20€ por persona. Como le he dicho al camarero, amenazamos con volver.

Haber gentecilla y lo diré una vez quizás dos jajaja pero aquí venden los miércoles y sábados unas migas para desayunar de ataque directo a la patata, felicidad con vinito tinto y pa'entro el camarero un hombre muy enterado de las cosas de la tierra te explica hasta el origen del mencionado plato, luego para comer, merendar, algúna copilla está bien y los precio bastante blandos, en Moratalaz un pequeño refugio que te hará recordar que los sitios familiares siempre te harán sentir como en casa su que estés a diez mil kilómetros de ella.

Sitio de comida casera de 10!
Trato muy cercano.
Sin duda los huevos rotos con jamón ibérico y las albondigas.

Suelo ir a desayunar y el camarero con gafas, de mediana edad que atiende en la terraza, es un señor encantador, amable y que atiende con una alegría y energía muy positiva.
Los croissant se salen del plato, son enormes y buenísimos.

Buen sitio para comer, tomar aperitivo estar con amigos, gente muy maja, es un bar familiar muy agradables todos. Me gusta

El sitio está bien pero el camarerote acosa para que pidas mas bebidas y/o raciones. Los miercoles migas con huevo. Sitio de toda la vida.

Un lugar genuínamente castizo de los que cada vez, desgraciadamente quedan menos en Madrid.
La atención excepcional por parte del camarero, amable, rápida y muy profesional.
La comida casera y deliciosa, para pedirse toda la carta.
Un lugar imprescindible en Moratalaz y en Madrid.