Municipal Sports Center Gymnasium Moscardó, Madrid
Direccion | C. del Pilar de Zaragoza, 93, Madrid | ||||||||||||||
Telefono | +34 913 55 32 01 | ||||||||||||||
Horas |
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Categories | Polideportivo, Centro deportivo | ||||||||||||||
Clasificacion | 2.3 42 opiniones | ||||||||||||||
Centro Deportivo Municipal Gimnasio Moscardó | |||||||||||||||
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Municipal Sports Center Gymnasium Moscardó opiniones
42Muy buena atención por parte del staff. He ido una vez al gimnasio, algo pequeño, pero suficiente para personas poco exigentes. La piscina, a la que voy asiduamente, genial. Si coincides con cursos de natación estan limitadas las calles y puede estar un poco aglomerado, pero en general no pasa nunca.
Gracias a este Gimnasio mi enfermedad está mucho mejor la gente encantadora y estoy como en casa Gracias
Mala actitud, grosera y altanera.
Así describo a la señorita que es salvavidas, rubia y ojos claros, muy mala manera de comunicar las cosas, me sentí avergonzada de haber llevado a mis acompañantes (con reserva) que de primera mano sabemos que es una piscina de entrenamiento y no de ocio, que ellos vieran esta actitud tan repudiable, pienso que hay maneras de comunicarnos dentro del respeto siempre.
Es un lugar público y vas a aprender a nadar y practicar, si me estoy quedando sin aire buscare la manera de quitarme del carril sin entorpecer a los demás lo tengo clarísimo, pero por eso mismo estoy practicando y me pongo en el carril lento, y que no me diga que no puedo ir en grupo, porque es un lugar público y estoy en mi derecho de ir y practicar con mis compañeros las veces que quiera, sinceramente no lo recomiendo.
Y la señorita mire a ver si cambia esa actitud. Porque terrible!
Un desastre. Cómo te pasa en muchas piscinas, bibliotecas y otros servicios públicos de Madrid, cuando llegas hay unos señores o señoras en la recepción (a menudo muy enamente charlado de sus cosas). Con su mal talante, su mala baba y sus respuestas típicas de persona con dolor de tripas, te recuerdan que si piensas que has llegado a un lugar para relajarte y pasar un buen rato haciendo deporte, estás muy equivocado. Has llegado al centro de tortura de la nueva gestapo. Perdona, pero dónde forman a este "personal", parecen carceleros de un centro penitencial. Y es que no se enteran que el lugar donde trabajan nos pertenece a todos.
Después de que la carcelera o carcelero de turno te trata con el mayor desprecio y frialdad que puede tienes que subir un montón de escaleras cochambrosas, te encuentras con unos vestuarios obsoletos donde la mayoría de las duchas no funcionan y tienes que bajar de nuevo unas cuantas escaleras hasta la piscina.
Esta está caliente, muy caliente para que te reblandezcas como un garbanzo y se te olvide la cara de los carceleros que como te vean en algún momento te lanzan una mi hitleriana. Es de locos. Hay que denunciar estas cosas y que pongan personal como Dios manda.
Es, con diferencia, el peor polideportivo público en el que he estado. Los vestuarios dan un asco terrible, están sucísimos, y el olor a meado es tan fuerte que se cuela en el pabellón de la piscina. Los baños parecen los de un festival de música. Experiencia repugnante. Yo no vuelvo
Me encanta ir a nadar. La piscina es pequeña pero el personal es sumamente atento y agradable. A veces esta masificado, sobretodo los fines de semana.
Vergüenza ajena es poco. Las duchas del vestuario femenino principal el agua congelada en todas, intento usar la ducha de personas con discapacidad puesto que ningún usuario estaba dentro y vienen dos señoras del centro como si fueran la gestapo a regañarme muy maleducadas y arrogantes aún habiendo explicado la situación del agua en las otras duchas de la forma más amable a ambas señoras, en ese intervalo de tiempo veo una cucaracha gigante en las taquillas se lo aviso a la señora y viene con una escoba a matarla tengo hasta una foto en el móvil para demostrar la existencia de la cucaracha. No volveré pero no por la falta de limpieza sino por el trato que he recibido y comentar que he salido llorando del centro no me había pasado esto jamás en la vida
Los instructores de la piscina parecen funcionarios públicos de oficina, se creen los dueños del lugar, de pie, dando gritos, viendo sus móviles, comiendo, les falta el café e ir a fumar.
Muy poca empatía.
Por favor, acelerar las obras!
La piscina es un caos!
10 personas por calle! Donde se ha visto?
gente que no saben nadar dando manotazos y golpea a los demás
Limitar el aforo! Y controlar cuanta gente por calle!
Y luego, por favor, dividir en una piscina las clases infantiles y el imserso, que, literalmente estorban, y en otra piscina las de nado libre!
O ampliar los horarios! O algo!
Ampliar los horarios como en otros polideportivos! 7am a 00.
Y calentar el agua! No puede estar tan fría!
A ver si de verdad modernizan el centro. Más CALIDAD humana, servicio e instalaciones!
gracias
El personal en general es amable y los instructores de actividades son muy profesionales, bien formados, se adaptan a todos los usuarios y agradables. Las instalaciones son muy buenas pero ahora mismo llevamos tiempo en obras para las pistas y la 2° piscina creo que es, a ver si no tardan mucho. Lo que ahora mismo hay, la piscina cubierta está genial y las duchas muy bien
Pequeño polideportivo de barrio que permite practicar deporte y asistir a clases en cualquier momento del año. Consta de 2 piscinas, pistas de paddle, gimnasio y sala multiusos. Precios asequibles.
No tengo quejas ni del personal ni de las instalaciones. Mis quejas se trasladan a la dirección de este centro.
Apunte a mi hija a natación solo hemos ido 3 días.
Una semana antes de empezar fui personal mente a que me dieran las normativas de la piscina y la natación que era donde mi hija iba, me dijeron que traerla y acompañarla y para la piscina gorro y bañador.
El primer día me llamaron la atención por que no podíamos estar, para mi algo total mente comprensible y sin ninguna queja.
El segundo día me dijeron que no podía esperarla dentro de las instalaciones en una sala de espera que hay junto a los vestuarios. No había nadie solo estaba yo y una vez más lo entendí por que con el covi fue comprensible. Salí de las instalaciones.
El tercer día me dijeron que no podía ni entrar a las instalaciones a ayudar ami hija de 8 años y menor de edad a cambiarse. El hecho para mi no es que se cambie sola si no que deje a mi hija menor de edad en un polideportivo donde hay muchas personas ir sola sin saber si llega o no a la clase.
Si hiciera una persona encargada para llevar al grupo al vestuario creo que para mi y muchos padres nos sentiríamos mucho más tranquilos.
Yo he borrado a mi hija de las clases. Y repito no tengo quejas ni de el personal ni de las clases pero si de la falta de seguridad a los menores. Espero que esto sea trasladado a algún superior y que mejoren y ellos mismo aclaren las normativas de dichas clases y se las hagan llegar a los padres. Y ya cada uno decida si le interesa o no.
Espero que sirva de algo.
Algunas instalaciones haría falta renovar un poco, pero el personal es muy amable y hay variedad de clases y posibilidades de practicar ejercicio físico en plena ciudad
Cuando aprendí a nadar con 7 años, me llevaba mi padre al cursillo todas las tardes bajo un sol de justicia. Uno de mis recuerdos preciosos de infancia. Un sitio lleno de momentos vividos y ahora parece que va a ser privatizado. Caemos en lo de siempre
Me engañaron por teléfono. El trato que me han dado deja mucho que desear y las instalaciones son muy mejorables. No volveré.
Qué persona tan desagradable, antipática y maleducada tienen en la taquilla este domingo por la mañana. Ni escucha, ni ayuda y además se permite menospreciar a los usuarios y sus propios compañeros. Seguro que pueden encontrar a alguien mejor para atender al público.
Mucha medida covid pero ni una ducha ni un secador. Para los chicos, vale pero las chicas nos tenemos que ir con el pelo mojado. Una pulmonía asegurada!
Las señoras q atienden al público en la entrada son unas ineptas. No tienen ni idea de nada. Es una lástima!
Fui por la mañana a preguntar si se daban clases de Kendo y me dijeron que así era, pero a esa misma hora (9: 30) por la noche. Entonces regresé a esa hora y resulta que ya estaban cerrando. Es decir, las clases se terminaron por la navidad. En ningún momento se me informó de esta ocurrencia por la mañana cuando consulte con los trabajadores. Puesto que vivo bastante lejos, he perdido 3 horas de tiempo entre ida y vuelta por la falta de información que los trabajadores de este centro deberían tener y por ende informar. Por culpa de esta ocurrencia me perdí una cita importante con mi novia completamente en vano. Tómense más en serio su trabajo. Saludos y buenas noches.
Me parece una vergüenza la atención al cliente que hay en este sitio. No sólo no es que no te cojan el teléfono sino que además te cuelgan.
Si vas en persona y te dicen que hay un problema en los horarios de reservas de pistas de pádel, que están equivocadas. Te dicen que ellos no lo van a solucionar, que llames al teléfono el cual nunca cogen y encima de una manera no muy amable.
Dependiendo con quien hables te dicen una cosa diferente: un día llevan torrespaña, al siguiente no, un día te dicen que reserves el último viernes del mes, al día siguiente que reserves el último día del mes.
Todo facilidades en este gimnasio!
Lo que sucede en este gimnasio con los trabajadores del centro es una VERGUENZA.
Soy del Barrio de Prosperidad desde que nací. He practicado diferentes deportes en este emblemático gimnasio.
Desde hace mas de 5 años practico Karate. Existe un tatami que colocan para la practica de este deporte los trabajadores del centro. Ahora en pleno COVID, y teniendo 3 turnos para practicar este deporte con personas de diferentes edades, no están desinfectando el Tatami entre los diferentes horarios. Ni que decir tiene que en los ejercicios que hacemos estamos en contacto con el suelo con las manos de forma habitual.
Además se produce la paradoja que al terminar la clase, el Tatami, en vez de recogerlo los empleados del centro, que muchos de ellos están charlando sistemáticamente y ociosos cuando terminamos las clases, lo tenemos que recoger los propios alumnos, sin ningún tipo de protección, ni gel ni nada parecido, y teniendo en cuenta que ni mucho menos es nuestro cometido.
He denunciado sistemáticamente esta situación, sobre todo ahora que existe el COVID en el Ayuntamiento de Madrid, pero hacen caso omiso de las quejas.
Me imagino que hasta que no exista un contagiado en las clases no van a parar.
ES UNA VERGUENZA.