Panaria, Manzanares el Real

El sitio es muy dulce, muy acogedor. El café es maravilloso, así como la tarta de zanahoria. Mi desayuno favorito en el pueblo. Panaria es un indispensable para quedar a charlar en un ambiente agradable, dentro del pueblo. Las chicas tardarán más o tardarán menos, es cierto que depende del día, pero son encantadoras

No vuelvo, siempre tardan muchísimo, dos desayunos con tostadas mini más de 10€, la tienda vacía tres dependientas hablando, me miraron, no me atendían, cuando ya yo me lancé y les dije que me atendieran, me pusieron unas tostadas del tamaño de un dedo y más blancas que el plato…Le pedí que me las tostara un poco … y al cabo de un rato me las devolvió iguales pero eso si, más duras que el tenedor.
En fin que pena.

Holaaa! Yo no sé cómo tienen una persona sola trabajando los desayunos pero no es todo en la zona de bolleria … hormigas! A los comentarios malos no nos deja poner fotos! Tengo dos con la hormiguita desayunando

Regular. Va por días. Hay camareras super agradables y atentas y otr@s que parece que están en otro planeta. Se confunden, tardan en atender, atienden antes a personas que han llegado más tarde. Habría que ver sus condiciones laborales, igual están l@s pobres hart@s. Pero repercute en el servicio. Hay cosas ricas aunque nada casero, caro para la calidad de los productos. Los cafés muy ricos. Hay leches vegetales.

El pan está genial, súper rico y con mucha variedad. No es la panadería más barata pero si quieres calidad lo recomiendo.
De bollería hemos probado menos pero también está bastante bien.
El personal muy atento y agradable.

Es lo único que hay para merendar /desayunar en Manzanares de el real con más variedad de dulces (bollos, cereales, batidos,) fuera de lo que es una cafetería de toda la vida.la bollería, casera poca o nada. Precio /calidad, no es barato. Tambien ofrecen comida salada.

Si vas a comprar el pan o algún bollo es correcto, aunque tampoco diría que tiene nada de especial. Si cometes el error de sentarte y pedir algo vas a descubrir lo que es el peor servicio de todo Manzanares el Real. Vas a poner a prueba la paciencia para esperar hasta que te hagan caso, hasta que te sirvan, hasta que te cambien lo que te han traído mal, hasta que te traigan la cucharilla del café que no venía con la taza, o el cuchillo para untar la mantequilla de la tostada. Solo para personas con mucha paciencia y capacidad de comprensión. El que esto escribe no vuelve.

La calidad de los productos de panadería y de los zumos no está mal, pero se quedan en un segundo plano por el pésimo servicio de mesas; no es normal que habiendo tres camareras y 5 mesas ocupadas tarden 15 minutos en tomar nota y que tomen nota sólo a una mesa cada vez. Tampoco es normal esperar 22 minutos de reloj para que te sirvan un té, que yo sepa, es poner una bolsita de tela en una taza de agua hirviendo.

Se come bien y los pasteles están exquisitos, también los zumos naturales y el café, pero deberían tener más personal. Las chicas que atienden son muy amables pero es imposible que pueda atender a todo, son muy pocas chicas atendiendo a las mesas de dentro del local y la terraza, y debes esperar mucho rato. Creo que los dueños deberían ser más profesionales y cuidar más de sus empleados. No se puede dar más por menos. Es una pena, porque la ubicación es perfecta y la decoración fresca y renovadora. La responsabilidad de que funcione mejor no es de los empleados sino de los responsables del negocio. Debería haber más personal, ayudando con más recursos a las personas que nos atienden con tanta amabilidad. Me entristece porque es un espacio que Manzanares necesitaba. Mi puntuación para los empleados es un 10, pero para el responsable que lleva el negocio deja mucho que desear. Me encantaría ver un Panaria con más comodidad para el cliente y para quien nos atiende.

Malísima, personal desagradable y chulesco, tienen 15 mesas y son tres chicas a cual más lenta.no volveré más y en cuanto pueda a la dirección (creo que sobrina del antiguo duque del infantado, D. Iñigo Arteaga), para que cambie de arriba a abajo todo el personal.
Actualmente el peor trato y calidad del pueblo.

Típica cadena de franquicias, el producto no está mal pero nada del otro mundo. En fin de semana, como tienen mucha gente, pasan de atender, te tienen esperando en la mesa (por la que igual ya has tenido que esperar) pasando una y otra vez y sin atender. Después de 15 minutos esperando (sabiendo la camarera que estábamos ahí ya que había limpiado la mesa) nos levantamos y nos fuimos.