Pasiones Argentinas, Boadilla del Monte

Muy buena la comida, lo que no me gustó es que te ponen el pan sin preguntar y te cuesta una barbaridad. Y muy caro todo.

Comimos genial! Además tienen opción sin gluten y pan, a resaltar el camarero que nos atendió, David todo un profesional y agradable.

Muy bueno todo lo unico q no recomiendo a mi parecer es la tarta balcarce porque es demasiado dulce pero lo demas muy bn todo ¡!

Acabo de salir del restaurante sin comer, después de más de 7 Años de cliente habitual hoy nos ha tratando una encargada que con autoritaridad nos quería hacer sentar en una mesa en medio de un pasillo que nosotros no queríamos. Acaban el perder dos clientes.

Amplio y bonito lugar en Boadilla del Monte para compartir un buen rato en compañía de amigos. Parrilladas argentinas, empanadillas de criollo exquisitas y buena carta de bebidas espirituosas.

Un sitio carete. La carta no es cara pero luego están los anexos. Bebida, cubierto, 3 cafés, etc que suben el precio, en mi caso un 70% más. Sin postre ni vino, 4 adultos 2 niños de 7 y 1 de 4 126 euros

Le pongo una estrella pues es lo mínimo que dejan poner, pero por mi les daría un cero. TRATO PÉSIMO POR PARTE DE DOS CAMAREROS.
Es una pena, porque como concepto de restaurante está muy bien, la comida es buena y el ambiente acogedor y agradable.
El problema se encuentra en el trato por parte de los camareros, fundamentalmente dos, uno alto y delgado, y otro canoso con gafas, he de decir que pongo las descripciones porque en ningú momento se han presentado.
A parte de hablarte de manera déspota y maleducada, hoy hemos ido 4 personas a cenar, pero uno de nosotros se encontraba mal del estómago y solo ha comido una ensalada y un poco de mollejas, sin más. Los demás si hemos pedido el braserito, es decir 3 braseritos.
Sorpresa! Cuando traen la cuenta nos cobran 4 braseritos, y al dirigirnos al citado anteriormente camarero con gafas nos dice de malas formas que la persona que NO habia comido pues no estaba bien del estómago si ha comido brasero y por tanto nos lo tienen que cobrar. Al decirle que eso no habia sido así, su nivel de chuleria ha subido hasta límites insospechados, intentando dejarnos por mentirosos.
Hemos pedido hoja de reclamaciones, que han tardado infinidad de tiempo en traer, y cuando finalmente la han traido de muy malos modos, al final mi suegro ha pedido hablar con el encargado. El hombre, muy amable por cierto, ha reconocido que sus camareros nos habían tratado mal y que evidentemente la persona que no había probado del plato no debería cobrarse. Aun así los dos individuos citados anteriormente nos han seguido hablando de malos modos, hasta el punto de que mi suegro ha tenido que decirle a uno que se fuera porque mientras hablaba con el encargado el camarero seguía con actitud chulesca y malas formas. He de decir que el encargado en todo momento ha tenido muy buena actitud y se ha disculpado.
En definitiva, un texto demasiado grande pero quería que quedara bien claro el problema con el que uno se puede encontrar en ese sitio, un trato pésimo, intento de estafa por su parte y una actitud chulesca y un tanto agresiva. Evidentemente no volveremos a ir, una pena ir a pasar una noche agradable y llevarte ese mal sabor de boca.