Public School Santa Quiteria, Alpedrete

Un colegio que recomiendo como antigua alumna y al que he vuelto como maestra de prácticas. Destacaría el buen ambiente entre el equipo educativo, los valores que se inculcan a los alumnos y la variedad de actividades que se llevan a cabo, desde los patios divertidos para evitar conflictos, programas con otros centros, residencias de mayores, sesiones de ajedrez, inglés con personal nativo fuera de las aulas además de todas las horas impartidas en inglés. Cuenta con un aula del futuro y tecnología en todas las clases con tablets y pizarras digitales. Pero reitero que su mayor potencial son los docentes con los que cuenta y la gran profesionalidad de estos. Forman una gran familia y eso se transmite a los alumnos.

En mi opinión:
- Instalaciones obsoletas.
- Sistemas de seguridad para los niños inexistentes.
- Formación profesional y atención a los padres deficientes.
- Recursos para los alumnos inexistentes.
En mi opinión, este centro debería ser inspeccionado por el Ministerio de Educación y Ciencia para realizar una inspección y mejoras, en pro del alumnado y de las familias que delegan la educación de sus hijos en dicho centro.

Mis dos hijos estudiaron en este colegio. Muy contenta con los docentes especialmente con Juanjo, buen profesor, director y mejor persona

The best school I have ever seen. It gives a lot of opportunities not only to children but to the teachers. Everyone is ready to help you. People are friendly, open - minded and flexible.
It was a great honour to work here. I got marvellous experience, which I would like to use in Ukrainian school.
The director does everything to help his students. He solves all the possible problems in due to encourage students and teachers. The teachers are intelligent, kind and so talented. Their lessons are interesting not only to children. It was very useful for me too.
When my daughter goes to school, I would like to choose this one school. It's really awesome.

Un trato exquisito y personalizado.
Buena organización y humanidad.

Este año cambiamos de cole a nuestra hija pequeña. Por razones externas, hicimos el cambio con matrícula extraordinaria y fuera de plazo. Para nuestra sorpresa encontramos por parte del director, Juan José Castillo Solís, una actitud comprensiva, abierta y un ánimo a facilitar todas las soluciones que estaban a su alcance.
Quería destacar un trato humano, personalizado y atento. Raro de encontrar y muy de agradecer. Se resolviieron todas nuestras dudas y se atendieron todas nuestras necesidades, incluido en menu vegetariano personalizado. Especiales agradecimientos para Estrella, encargada del comedor que elaboró y proporcionó un menu excelente "a nuestra medida".
Un equipo excelente!
Gracias por vuestro buen hacer y por el ánimo de ayudar!

I work as an English assistant at this school and I have been very happy with my experience! The administration and teachers are very kind, flexible, and work very hard to make the experience of the children fulfilling and fun. The kids are eager to learn and often speak English with me and help friends practice their English.

A school full of inspiring teachers and great personnel. The school offers an abundance of resources for the students to succeed. Highly recommend to parents and students.

Es un colegio muy acogedor, muy agradable tanto para los niños como para gente de prácticas, se aprende mucho.
Lo pude vivir en primera persona ya que estuve allí cuando era pequeña.

Doy las gracias por los años vividos y por poder experimentar la enseñanza durante el periodo de prácticas

Orgullosa de haber pertenecido al equipo docente por su profesionalidad y compromiso. Agradecida al AMPA por su implicación en el centro.

Un gran colegio con unos muy buenos profesionales docentes.
Estuve cuatro meses como maestra en prácticas y solo puedo decir cosas buenas de mi experiencia.
Hay muy buen clima entre los alumnos y entre los profesores y equipo directivo; los niños se sienten como en casa.

Un colegio de 10, hablo como experiencia de alumno y de profesor de prácticas. El ambiente es genial, l@s profesor@s son estupendos y las actividades que se realizan son muy divertidas. Desde que me dijeron de hacer las prácticas en mi universidad no dudé en elegirlo

El colegio con las raíces de Alpedrete, por donde han pasado gran parte de sus jovenes, hoy padres que siguen trayendo a sus hijos con orgullo a las clases que ellos utilizaron en su dia. Gran ambiente de trabajo familiar y cercano.

Mi hija está encantada con el colegio y con su profesora. Aprenden muy bien las materias. Todo el equipo del colegio es encantador y muy profesionales. El mejor colegio de Alpedrete, sin duda alguna.

Desde que me jubilé hace ya seis años, suelo visitar varias veces al año el colegio Santa Quiteria. No lo hago por nostalgia, pues sigo disfrutando de la vida con mis distintos entretenimientos, sino porque vuelvo a un lugar en el que ejercí mi profesión más de veinte años. Sí, soy maestro y trabajé en este colegio. Y a pesar de lo que pueda parecer, no quiero mostrar una opinión parcial, sino justa y mostrar la realidad que he vivido esta mañana. He comprobado que todos los que trabajan en el colegio se han tomado muy en serio el tema de la pandemia poniendo todos los medios a su alcance para proteger adecuadamente a sus alumnos en un entorno tan especial como es un colegio. Rutas marcadas de entradas y salidas, medidores automáticos de temperatura para los mayores, para que se sientan partícipes de las medidas preventivas, termómetros digitales en manos responsables para controlar la temperatura de los pequeños y gel hidro-alcohólico. Mucho gel. Y ventanas abiertas, y separaciones entre alumnos, y grupos burbujas, y medidores de CO2 que pronto estarán en todas las clases y que ya hay en el comedor, y mesas para que coman con seguridad con las plazas separadas por mamparas de plástico, y recreos por grupos… Está claro que cuantos trabajan en Santa Quiteria han puesto todo su empeño en adoptar medidas preventivas, algo que algunos de ellos ya estuvieron haciendo durante las vacaciones de verano.
Acaso todo ello haya servido para crear el ambiente de normalidad que se respira al pasear por sus pasillos. Las puertas abiertas de las clases permiten ver cómo los niños están tranquilos, relajados, trabajando como siempre lo han hecho, habiendo asumido que hay adultos que velan por ellos. El sordo rumor de su trabajo, como si nada pasara, recuerda a una colmena en plena actividad, prueba de su normalidad. He disfrutado enormemente de la visita y he quedado gratamente sorprendido por cómo sigue funcionando de bien el colegio, incluso en estos momentos tan difíciles. Enhorabuena a todos los que lo estáis haciendo posible.

La verdad fui hay para un torneo de ajedrez y no había un buen servicio y los niños no tenían respeto hacia las personas que competian