Pupuseria Madrid Rio Grande Atocha

Entramos en el local y nos encontramos con un restaurante acogedor, con muy buena música y una decoración muy colorida.
Nunca habíamos probado la comida salvadoreña y nos sorprendimos mucho de lo rica que estaba; ni muy picante ni muy fuerte a diferencia de la comida mexicana.
Otro punto a favor eran los precios, por 11 euros pudimos probar varias cosas de la carta con bebida y salir con el estómago lleno.por último, trato de los camareros cordial sin nada a destacar.

Food is great here! I took vegetarian fajitas and they were amazing!
Actually it was my first time trying this kind of a food so I was afraid that it will be spicy or that it will be hard to eat it, but the taste was very good, not spicy at all.
They bring you like 4-5 tortillas, hot pan with vegatables and plate with guacamole, sour cream, red bean thing and etc. So you have to basically make it yourself, but it’s so cool!
The portion is very big, it was too much for me.
Also marakuya refresher is super nice.
Staff speaks english and are very professional and nice. Totally recommend this place!

Calidad precio inmejorable, excelente ubicación en el centro de Madrid, el ambiente limpio y los camareros muy amables.
La comida deliciosa. 100% recomendable

Muy rica comida (recomiendo las pupusas con queso), solo he comido pupusas pero tienen un amplio menú. El único problema es que se tardan demasiado con la comida y su precio ha subido

Un sitio de 10 para comer pupusas. Imprescindible si te gusta el picante, aunque también hay opciones sin picante. Volveré.

Comida normalita, fuimos 7 y salimos desencantados, los chicharrones con yuca estaban duros, el pollo con tajadas era casi todo hueso y muchísimo ruido. No me gustó la verdad.
Además, pedimos unos platillos para una tarta y sin avisar nos lo cobraron, sin avisar y nada barato la verdad, un engaño.
En cuanto al covid 19, te dan gel a la entrada pero innecesario ya que estando allí todas las mesas muy pegadas y ningún tipo de desinfección entre cliente y cliente.

Excelente descubrimiento, comida muy rica y con una carta variada y amplia. Las porciones son muy generosas así que mejor ir con hambre! La atención insuperable, muy amables te explican todos los platos.
Sin duda vale la pena este rincón latino.

Yo he vivido en El Salvador y las pupusas que comí allí saben iguales que las de este local, incluso el encurtido es igualito. Es bueno, bonito y barato.

La atención de maravilla la comida riquísima les invito a que puedan pasar un momento en familia y en un bonito ambiente

Al leer los comentarios me he dado cuenta que tuve mala suerte.al parecer casi todos han tenido una excelente experiencia, pero yo no dure 20 minutos para ser atendido, al entrar solo me señalaron la mesa donde debia ubicarme y alli estuve esperando sin que me ofrecieran nada que beber por mas de 20 min y otra cosa la musica estaba tan alta que nisiquiera se podia conversar, la comida al momento de llegar si estaba muy bien pero el hecho de haber esperado mas la musica alta y cambiante, ya habia dañado toda la experiencia solo comi y me retire.
Como consejo como coach de atención servicio debemos buscar que los clientes tengan una buena experiencia y quieran quedarse mas tiempo por tres razones.
1) van a consumir mas y se sentiran bien como clientes
2) querran volver
3) recomendaran el lugar.

Es nuestro primer salvadoreño, y lo disfrutamos mucho. Nos fliparon todos los platos, deliciosos y sabrosos. Además salimos a 15€/persona, y el precio es inmejorable.

Pedimos yuca con chicharrón (delicioso y crujiente), enchilada catracha (super crujiente, nada que ver con las mejicanas, super rica), tamal de gallina (muy rico, pero muy denso), pupusas de jalapeño con queso, revuelta y loroco con queso (todas super buenas, y la estrella de la comida, la más rica es la de loroco, una locura), canoa de plátano y licuado de guanábana y maracuyá.

Todo muy rico, las pupusas unas de las mejores que he probado en Madrid, ya que otros lugares dejan mucho que desear, la dueña creo que era, pues muy amable y muy atenta, no suelo realizar reseñas pero ella ha Sido muy encantadora, he ido a comer muchas veces sus pupusas y nunca había tenido la oportunidad de conocerle ni hablar con ella, ha Sido un placer, está vez me voy encantadisima

Delicioso todo, en cuestión del tiempo de espera es correcto es comida preparada con mucho amor, repetiremos calidad precio bien por no decir que su personal es profesional, vergüenza aquellos comentarios absurdos desde luego Honduras me tiene enamorada por su rica comida
VOLVEREMOS!

Me atendió un tal "luis" por teléfono me dejo esperando 15 minutos para hacer un pedido llegue al restaurante y mis puspusas no están lista y llegue al restaurante y me hicieron esperar 15 minutos más cuando yo llame 15 minutos antes  para no estar esperando. 3era vez con mala atención

Bien pero en tiempos de la Covid no hay espacio suficiente y se comparten recipientes de salsas

La comida es muy buena, los entrantes, los platos típicos, las pupusas, el curtido, la salsa…en fin todo. Sin embargo, la razón de las tres estrellas se debe a que el servicio deja mucho que desear. La atención es indiferente, lenta y no es constante. No hay un trato cálido y se percibe que los empleados están haciéndolo un favor a los consumidores. Esto es algo que se puede mejorar para el beneficio del restaurante y del consumidor.

Tienen una opción vegana con frijoles que está muy buena, bastante concurrido, recomendable ir a primera hora.

Entre mis favoritos restaurantes acogedores en Madrid. Buen ambiente, personal amable y comida riquísima. Sus pupusas son deliciosas y su salsa casera está muy buena. El dueño es muy majo y hace muy buenas margaritas. Muy recomendable

De lo mejor en comida de centro América. Somos clientes habituales.ir entre semana. Pedir encurtido tanto con picante y normal.

Sorprende la comida, está muy buena. En mi opinión los precios son muy caros. Es comida latinoamericana, de varios países, México, Nicaragua, etc. Fuimos un grupo de 6 personas y pedidos 2 pupusas y unos nachos para compartir, luego cada uno un segundo. En mi caso pedí dos coca-colas y me salió un poco menos de 22 €. Los camareros no son muy amables y la puerta cada vez que se abre hace sonar un timbre un poco molesto. Si vas con prisas mejor no ir, son lentos y la comida tarda mucho en prepararse. Lo mejor sin duda es la variedad de los platos y la cantidad en cada uno de ellos, con hambre no quedas. Buena calidad y buen sabor.