Restaurante Atrapallada, Madrid

Un desastre la comida y mala atención había muchísima gente y no daban abasto los camareros

Está chulo el sitio, estaba lleno, muy bien con medidas Covid y la comida muy buena excepto el pulpo que no nos llamado la atención, no sabia a nada, las zamburiñas y navajas muy ricas. Precio alto. De media 45/50 pers.

Llegamos con las expectativas del anterior restaurante, PERO, la comida ahora es mediocre y los camareros con prisa e incluso malos modos.

La comida esta riquísima pero sin duda lo que lo hace destacable a este lugar es Unai. Buenas recomendaciones, trato profesional y cercano al mismo tiempo. Hemos ido en varias ocasiones y seguiremos disfrutando tanto de la comida como de trato.

Es mi restaurante de referencia. Se come de cine. Mucha variedad. Pescados excelentes, igual que el solomillo de ternera. Los entrantes, con el pulpo a la cabeza, fuera de serie. Aconsejo ir a Atrapallada en comidas familiares y de celebración Y tiene un justi precio. Valoración, 9,50 puntos. Y todo regado con albariño fresco

Pues el servicio y la atención no tienen un pero.
La comida, ya no me pareció que estuviera tan bien. Los entrantes, patitas de pulpo con cachelos y miel de membrillo, bastante sositas. El tartar de solomillo si estaba muy bueno, pero la cocochas crujientes con mayonesa de algas, no eran nada crujientes, tenían un rebozado y poco más pero de crujientes, el nombre y la mayonesa muy ligera sin sabor a nada.
Los segundos fueron un solomillo brasa, bien y dos arroces el de rabo de toro y boletus, bueno, algo grasiento pero más o menos aceptable, el arroz negro muy grasiento.
Los postres, el arroz con leche con el grano muy entero, parecía vaporizado, un sorbete de albariño y orujo que cambiaron amablemente porque solo sabía a helado de limón, un tiramisú bastante insípido y una oblea de manzana que sí estaba muy buena.
Me da mucha pena haberme llevado esta experiencia tan regular de un clásico de toda la vida.
El precio, pues lo pone bien claro en carta pero para la calidad recibida está vez, me pareció un exceso.

Restaurante ideal para comidas o cenas familiares, celebraciones especiales o eventos de empresa. Aparte de la calidad de los pescados y carnes, nos gustó la variedad de entrantes y postres que había. Los arroces son maravillosos y la atención fabulosa. ¡Un 10!

El tomate con ventresca, flojo y mal aliñado, steak tartar está bien hecho, calidad de producto pero poco más.
Esperaba algo más, pero en general trato correcto y buen ambiente

Nos trajeron la comida fría y al hacérselo notar, el camarero en lugar de solucionarlo nos preguntó que qué hacía. Un poco surrealista que el cliente tenga que buscar soluciones a un mal servicio. Al parecer en una mesa cercana también les trajeron la carne fría y se la tuvieron que llevar igualmente.

Sólo bien, uno de los platos de cordero estaba congelado y se ha quedado frío por dentro.
La atención estupenda, lo esperaba mejor.

Hoy he vuelto ha ir después de unos meses y todo a cambiado mucho me han puesto unas navajas crudas unos aperitivos rancios los platos principales a medias.en fin una pena. Era un restaurante buenísimo pero ya no.

Lugar y atención muy buena.
El precio medio del pincho muy caro 4 €, un café sólo 2,60€ y una Alhambra 4,10€. Precio por persona 30€.

Se cena mejor que te toma algo en barra. Merece mas la pena ir a cenar.

Me gustó, pero para dar una opinión más fundamentada necesito repetir. Solo pude probar las zamburiñas y el arroz negro. El arroz negro iba teniendo mucho mejor sabor conforme pasaba el tiempo, por lo que creo que lo sirvieron sin el debido reposo. Buen ambiente, servicio muy rápido y agradable.

Un trato excelente por parte de los camareros y la comida te gana a la vista desde el comienzo y después desde el sabor. Es cierto que no es barato, pero es el precio de la calidad.

Me siento defraudado, después de casi obligar a mis amigos a venir a cenar por la calidad del producto y del servicio me encuentro con la carne fría y la pluma congelada y cruda. La solución del camarero nula, pretendía calentar la carne de cerdo con la salsa. En fin, mala experiencia.

El lugar muy bonito y agradable. La calidad de la comida ha bajada bastante así como la cantidad en las raciones. Nos quejamos por la cantidad de la ración de rabas que aprecia una tapa y nos dijeron q era por el precio (12€¡¡¡¡¡¡). Camareros poco agradables. Ha empeorado bastante on el tiempo. La calidad precio no está ajustada.

Hacia muchos años que no venía pero Nada cambio el servicio genial la calidad como siempre espectacular

Muy buena comida, y calidad. Ayer un poco flojo el servicio, pero todos tenemos un mal día. Se puede perdonar. En general muy bien, como siempre.

Decoración muy moderna y agradable, problema? Que hace efecto amplificador y el ruido se multiplica por 3! Difícil mantener una conversación agusto o sin gritar.

En cuanto a la comida poco que decir, lo más básico parecen aún no dominarlo, salar! Bocados que estaban ricos, bocados que no saben a nada más que a SAL! Y luego cuando viene la cuenta te sientes estafado, si la mitad de la comida no has podido saborearla!

La camarera daba miedo, actitud de sargento.

No sé cuál será el aforo para interior, en domingo de agosto estaba totalmente lleno. Dos puertas abiertas pero no sé yo.

Estuvimos tomando algo en mesa alta interior. Local agradable, servicio atento.oferta de vinos muy batallera. Agradable pero sin más