Restaurante El Anzuelo, Lozoya

Se come fenomenal, muy buena calidad a precio razonable; terraza cubierta, en la terraza dejan traer perros. Personal súper amable

La comida buenísima, las croquetas de boletus riquísimas. Las camarer@s muy amables y muy atentos. El único inconveniente que hace un pelin de fresco, pero todo muy limpio, acogedor.

Riquísimo todo. Un plus a q en la terraza cubierta dejan acceso a los perretes.
Cualquier plato q se pida exquisito. Personal atento y profesional. Servicio rápido. Éramos 15 y perfecto.
Repetiremos sin duda.

Esta bien y entre semana con un menú del día asequible, pero con platos muy básicos. Los tallarines pasados y salsa de bote. Las costillas asadas, correctas, salvan el menú, el postre, flan, tirando a normalito, sin más. Supongo que la carta será de más calidad y mejor elaboracion. La mayor ventaja es que en todos los alrededores es el único que está abierto todos los días de la semana. Servicio amable y atento. Baños bastante limpios. Comedor con muy poca iluminación y algo frío. Se aparca muy bien junto al mismo restaurante y con buenos accesos a la inmediata carretera. Se puede volver.

Un sitio estupendo, nos atendieron de maravilla, fueron rápidos y atentos. Un placer comer el Anzuelo

Totalmente recomendable. La comida riquísima! Los saquitos de setas nos encantaron, la morcilla de la mejor que he probado, los judiones y el arroz con leche casero estupendo! Cabe destacar la buenísima atención que tuvieron con nostros, tanto por teléfono 30 min antes de llegar, como en el local, las dos camareras y el chico que nos atendió fueron súper amables. Muchas gracias por todo! Volveremos!

Todo riquísimo, la segunda vez que vamos y no decepciona. Especial mención a las carnes, el entrecot una delicia.

Me a encantado. La comida muy buena y la atención fenomenal, te ofrece alternativas para los niños

La terraza es agradable. Comimos menú, escaso en cuanto a cantidad y mediocre la calidad.
La atención podría mejorar, tardaron en atendernos, hubo un malentendido con el pedido y a partir de ahí fueron bastante bordes. Estuvimos casi toda la comida sin agua.
En la carta no se hace mención al menú, tampoco hay ningún cartel ni pizarra que indique los platos del día ni el precio.

La atención estupenda, todos los camareros muy atentos. La comida muy rica y buen precio, muy buen ubicado y con buen aparcamiento. Para repetir!

Experiencia 7

Aspectos positivos
El espacio es muy grande y tiene un jardín amplio
Zona de aparcamiento

Precios muy económicos

Atención cercana

Recomiendo los calamares y el risotto.

Aspectos a mejorar

Nos atendieron muy lento aunque éramos muchos

Se confundían bastante.

Calidad de los platos media

Repetiremos porque está cerca de nuestro pueblo pero ese día quizá por ser pleno agosto (aunque era martes) estaban hasta arriba.

Hay que tener cuidado e ir lento porque el acceso por menos de nada te lo pasas. Esta En medio de una carretera.

Fantástico paraje, gente muy amable y atenta, buena brasa y asados de encargo. Muy agradable. Lástima que el encargado no nos ha dejado sacar una tarta de cumpleaños que llevábamos (cuando hace 2 años sí nos dejó). Aparte de esta circunstancia, muy agradecidos con el trato y la experiencia.

Imprescindible parar a comer si subes a la sierra. Buenas carnes, buen precio y restaurante muy acogedor y bonito. Gran terraza.

Relación calidad precio inmejorable! Ni 45€ para 2 personas, incluyendo risotto y chuletitas de cordero, repetiremos seguro!
Con un personal atento y unas vistas de la sierra, hacen un 10 al restaurante.

Carta surtida, buenos productos, y cocina elaborada y sorprendente. Riquísima la morcilla rebozada, los saquitos brick de setas y huevo, y las carnes a la parrilla. Mucha calidad y servicio amable y atento. Una buena opción para comer en la sierra.

Muy recomendable, acogedor y buen servicio.
El personal es muy atento y la comida es excelente buena relación calidad precio.
Un lugar donde repetir, hemos quedado muy satisfechos

Los huevos rotos, sin más. El entrecot, rico de sabor. El cochifrito, sin más. Todo esto sería pasable si los precios fueran medios/bajos. Pero los precios eran altos, entonces, esperaba que estuviera todo un poco mejor. El servicio, genial, y el lugar también.

Se come muy bien. Tanto Feli, la propietaria, como Ramona son encantadoras. Da gusto que te traten tan bien. Seguiremos volviendo.

Excelente comida y parada obligatoria para tomar café para seguir la ruta en invierno con su chimenea encendida una pasada tomar café a las 7 de la mañana

Es genial ver como sitios como este tienen un servicio fantabuloso tras el 2019 y 2020. No sabía, además, aunque había parado alguna vez hace tiempo, que hay buena info sobre la pesca, ese deporte donde se puede practicar en modalidad de suelta y/o captura, en las medianías de este bar.

Parar, aunque sea para tomar un café y saborear aromas de una primavera otoñal, como cuando fui, bien vale una alegría.
El personal bárbaro, es decir, en relación calidad precio, un doce sobre diez o un 7 sobre cinco estrellas, como las de la Comunidad de Madrid. Tanto quien limpiaba el aseo antes de servirme el café, hasta quien despedía a los clientes que ya había cuando he llegado, sencillamente, genial.
Del entorno mejor no escribir nada, mejor acercarse cuando se pueda y comprobarlo por si mismo. Recomiendo ir días entre semana, que la cosa los findes se debe de poner un tanto saturada. Es ese lugar donde escuchar el trascurrir de los coches o bicis en esos ríos de asfalto, antes de llegar al mar de la A2.
Muy bonito todo y muy buen explicado.