Restaurante Jai Alai, Madrid

Un lugar genuino para disfrutar sin prisas.

Lo mejor de Jai Alai es sin duda la primera vez que llegas a esa pequeña puerta de marcos verdes y empiezas a subir las escaleras de una casa… y descubres un lugar en el que te atrapa el tiempo, imposible imaginarse este sitio en Madrid.

Sin duda es el lugar para disfrutar de una buena comida, sobremesa, evento privado, … porque sabes que tratan al cliente con mucho respeto y atención.

Y por aquí, como siempre, mi valoración:

? Lo mejor:
- El sabor de todos los platos que probamos, la verdad que todo un acierto pidiésemos carne o pescado. El salteado de habas!
- La atención de los camareros, profesionalidad.
- La relación calidad-precio.

Lo peor:
- Reserva sí o sí, no hay más.
- Mesa pequeña para 4 personas adultas + los platos. Nos pusieron en una mesa cuadrada y no entraban bien.
- Difícil aparcamiento en las calles donde está, apenas hay huecos.

Sorprende que haya una terraza muy apetecible en pleno centro financiero. Prácticamente todas las mesas son redondas, muy cómodo para ir en grupo. La comida muy buena, merece especial mención el risotto y el solomillo. Personal atento y, de medidas para el COVID, antes de sentarte te dan una funda para la mascarilla y gel hidroalcohólico.

El bacalao muy malo. Las croquetas de jamón son muy buenas pero el resto no lo son. Extremadamente caro para la comida que ponen. Permiten fumar en el establecimiento a pesar de que está prohibido. No volveré.

Magnífica terraza. Servicio excelente. La chistorra y el solomillo no se debe dejar sin probar. Un clásico que mantiene toda su calidad

Ni la comida ni el servicio valen ni de lejos lo que cobran por los platos. Por lo que pagamos, tienes muchos restaurantes en Madrid con una calidad muy superior.

Apuesta segura en Madrid. ¿No quieres fallar? Aquí aciertas seguro. Materia prima de alta calidad bien tratada, servicio esmerado y atento, decoración acogedora, ubicación privilegiada, or3xuos razonables. ¿Qué más de puede pedir?

Un sitio fantástico. Comida tradicional siempre exquisita, especialmente las croquetas. Siempre que vamos salimos satisfechos. También muy buen sitio para celebrar eventos. Hace tres años celebramos nuestra boda y quedamos encantados. También hemos celebrado cumpleaños y otras ocasiones especiales, en habitaciones con mucha privacidad. Lo dicho, un sitio fantástico y muy bonito.

Muy llamativo la perdida de calidad y servicio. 1 h entre los prineros y los segundos, se quedaron sin pan, unos chuletones de 1kg que dificil llegaban a los 700gr, el servicio justisimo corriendo de un lado para otro esperabdo un moton las bebidas. Inaceptable para el sitio

El lugar es muy agradable y el servicio correcto. Pero la relación calidad precio no cumple con las expectativas.

Comida casera bastante buena. Menú del día a precio medio con mucho donde elegir. No todos son igual de buenos pero no suelen fallar. Servicio súper rápido.

Buena carne, buena atención. Para mi, ha fallado en el postre, ese arroz con leche está mal preparado, era un "leche con arroz". Es mi opinión.

Buen sitio para comer. Todo delicioso. Txanguro exquisito, solomillo excelente, chistorra super suave,

Tiene mucha fama pero nos fuimos con hambre.
Era una reunión organizada de antiguos compañeros, y nos fuimos con hambre.
La fama hay que mantenerla.

Cocina de producto. Calidad a un precio más que razonable. La merluza frita es la mejor que hoy se puede comer en Madrid. La terraza abierta del piso superior está entre las 5 mejores de Madrid. Mucho oficio en los fogones y en el servicio. Ambiente muy familiar.

Cena de grupo: 50 personas perfecta. Adaptamos el menú a nuestro presupuesto, y a nuestro horario las 20,00 porque el grupo era europeo principalmente del norte y los horarios son distintos. La terraza es el entorno ideal para una noche de calor, la decoración muy pensada, los camareros siempre pendientes, las mesas individuales se separaban de nosotros con un biombo, se habla con tranquilidad. La casa dispone de ascensor, también aparcacoches, la comida muy rica. Organizar esta cena con María José fue un lujo, nunca puso una pega a los sucesivos cambios que se fueron haciendo aunque al final volvimos a su propuesta inicial y fue un acierto. Si lo recomendaría para un grupo? , sin dudarlo.

Tortillas de patata de diferentes sabores muy ricas. El menú está muy bien, estilo casero 100%, un poco caro.

Un sitio agradable y especial para comer en grupo. Una decoración sencilla y confortable. La atención es cuidada y efectiva. La carta es variada y tradicional y la comida sabrosa y con raciones adecuadas. Hay parking cercano y muy cerca de la estación de metro de Nuevos Ministerios