Restaurante Jarritus, Madrid

Very nice atmosphere. The service is friendly and the food delicious. We went for the burgos sausage - amazing - and the grilled beef, which was very good. In summary, a very good experience.

Ottimo posto, camerieri gentili e disponibili.ubicato vicino alla piazza dei tori serve una cucina típica spagnola.buona la paella caldosa di bogavante e el rabo de toro.con circa 25 euro in due esci soddisfatto e con la pancia piena.

Desiludionado esta última vez.
Había mucha gente pero eso no es motivo de todos los fallos y calidades extrañas, esperas etc.
Por lo demás siente buen trato y he probado aquí una de las mejores tapas.

Siempre vamos a este sitio la atención es muy buena, el dueño muy atento. Las cañas y la comida de lujo, especial para ir con amigos o pareja.

Entramos de casualidad después de una corrida para cenar algo, un bar de ambiente taurino. El que parecía el encargado muy amable nos sentó en seguida en la parte de arriba, comimos por persona una hamburguesa y una jarra de cerveza y salimos15€ cada uno, un precio razonable. La hamburguesa rica y con patatas caseras, algo raro de ver hoy en día.

Sugiero probar. Buena cocina, atención amable y jamón de Los Pedroches de categoría: calidad producto y corte profesional

Al lado de la Plaza de Toros de las Ventas, este restaurante es una de las mejores opciones para acabar la jornada. Ambiente animadísimo y temática taurina en su decoración. Varios televisores transmiten los acontecimientos taurinos. Servicio eficaz y atento para una cocina clásica con toques de modernidad muy acertados. Terraza exterior, barra y comedores en planta y piso superior. Compartimos unas anchoas del cantábrico, tomates aliñados, chipirones de anzuelo a la plancha, alcachofas con langostinos y una torrija con helado. Todo muy bien. Repetiremos y reservaremos nuestro estómago para probar los platos más contundentes

Un bar-restaurante típico de la zona muy taurino y con una atención exquisita donde la materia prima se impone, muy bueno para tapear comerse unas raciones con unas cañitas.

Como amante del jamón he de decir que aquí ha mejorado mi paladar jejejeje. Es una barbaridad la calidad que tiene de jamones y no solo eso, es que te explican todo para que puedas entender y diferenciar un jamón de mejor calidad al insuperable. Es un sitio donde repetimos siempre que podemos porque dan ganas de repetir y no solo por el jamón.
Atención buena y se dan vida en atenderte. Merece la pena pagar una ración se jamón, es la estrella del sitio. Los Pedroches y Joselito no fallan.
Repetirás y lo sabes.
Lo bueno de ser “taurino” es que no tienen cabezas de toros disecadas ni cuernos. Fotos muchas pero ya esta. Se agradece poder entrar así.

Mi experiencia fue muy buena, el día anterior reservé una mesa para dos, al llegar nos recibió un simpático y amable encargado que te hace sentir como en tu casa. El local es pintoresco, tiene una barra muy grande llena de apetitosos pinchos, al final tienen una vinoteca con barriles para sentarse, muy curiosa y bien iluminada. Las mesas del restaurante están arriba en el segundo piso, es una zona tranquila y agradable. Los baños también limpios y bien equipados con jabón y toallitas de papel, algo que siempre se agradece. Al llegar nos prepararon la mesa enseguida aunque tomamos una cerveza en la barra, muy bien tirada y acompañada de unas empanadillas de rabo de toro exquisitas. El menú diario de 12 € está rico y muy equilibrado en relación calidad precio. Tomamos un guiso de patatas marineras que tenía de todo, calamares, pulpo, mejillones y almejas. De segundo presa ibérica a la parrilla y un lenguado relleno, que estaba bastante rico aunque la guarnición de tempura y patata le faltaba temperatura y se notaba que no estaba hecha al momento. El postre (un vasito de chessecake con frutos rojos casero) también muy rico. Alargamos la sobremesa tomando una copa y la verdad es que nos sentimos muy a gusto en este restaurante, no solo por la comida, sino por el amable trato del personal. Sin duda volveré