Restaurante La Alegría, Madrid

Todo correcto hasta que nos llegó el lomo de buey que estaba pasado y con mal sabor. La camarera muy buena profesional y muy buena atención.

Hemos desayunado café con tostada de aceite y tomate. El pan no era reciente, sino del día anterior y, como encima, no lo tuestan, sino que lo hacen a la plancha, pues la parte exterior del pan no queda crujiente, la textura de fuera estaba como "chicle". Para mi gusto, eso lo solucionaban perfectamente con una tostadora y ni siquiera se notaría que el pan es del día anterior. Y creo que cobrándote 2,80 euros sería lo lógico que, al menos, el pan fuera reciente. Por otra parte, el café estaba bueno y el aceite y el tomate, perfecto.

Servicio pésimo. Nos sentamos en la terraza y el camarero ni nos atendió se dedico a poner sillas y le dijimos a los 15 min si nos atendía nos dijo que no había servicio. Cuando en otras sillas había gente tomando algo. Nos levantamos y fuimos al bar de al lado nada que ver.

Pedí menú del día, costó 13€
De entrante pedí un salmorejo, estuvo muy rico y refrescante en este tiempo de verano.
De segundo un cordero asado. Muy rico.
Y de postre tarta.
Acompañan con pan y agua.
Las raciones están bien si no quieres salir muy hinchado.

Bar restaurante del barrio. Muy agradable la terraza en la placita. Grande y tranquila. Cerveza y raciones asequibles y buenas.

Malísimo, Demoraron una eternidad en atendernos, atendieron antes a una mesa que llegaron mucho después.
Cuando se dignaron a atendernos pedimos 2 cervezas, que de paso carísimas, 4,5 euros el cual demoraron demasiado en traernos. De paso, de tapa nos dieron unas papas todas feas en un bold poco presentable que ni en mi casa sirvo. Después de eso pedimos la cuenta y nos fuimos, no quisimos pedir comida, si así era de entrada, no me imagino la comida.

Nos sirvieron cazón en adobo en mal estado. El camarero se lo llevó de vuelta y lo trajo al rato diciendo que se habían equivocado en el adobo y que volviéramos a probar otro. Este segundo estaba en el mismo estado. Las croquetas de jamón también estaban pasadas y nos sentaron mal. Trato nefasto del camarero.

Comida escasa.
La ración de croquetas de jamón servida en un tupper. Las croquetas de muy baja calidad y el jamon brillaba por su ausencia.

El servicio de camareros poco atento con poca gente.

Bar de barrio, buena carta de raciones. Para mi gusto los precios algo altos, pero te atienden rápido y con amabilidad.

Eramos 3 clientes. 2 cafes ellos y una cocacola yo. En terraza. Hemos tenido que entrar todos dentro tanto a pedir como a pagar. Una vez he entrado ha tenido que avisar otro empleado a la camarera porque le he pedido la cuenta y ni se enteraba (a 2 metros de mi). El otro dia un camarero nos atendio genial a mi novia y a mi pero esta camarera es una incompetente. Si vuelvo alli y esta ella me voy a otro bar donde den un servicio adecuado porque mas de 20 minutos esperando a que se asomase a la terraza y he tenido que entrar yo. Una vergüenza

Muy agradable las raciones de terraza, los calamares y los caracoles en salsa estaban muy buenos

Antes de la pandemia estaba bastante bien, pero ahora es caro y la atención regular, lo único bueno es la zona de terraza que tiene.

Para desayunar, pan duro del día anterior que costaba comerlo tostado, a saber cómo estaba cuando lo cortaron.
El tomate 4 gotas, y el jamón reseco.
2 tostadas duras con jamón reseco, un café, un zumo y un cola cao: 16 eurazos.

No volveré, no merece la pena.

Caro para la calidad de los platos.

Un plato de pimientos asados de bote, con 6-8 gambas al ajillo y dos huevos fritos (con la yema hecha). Y sorpresa cuando llega la cuenta de 20,5€! Un plato de no más de 12-14€.

El precio debería de indicarse en la carta.

Se come medianamente buen trato de la camarera del Ecuador, pero no entiendo lo del nombre del restaurante, x que los camareros de alegres poco jajajaa

Después de casi 15 minutos en la terraza esperando, he tenido que entrar a pedir y servirme yo mismo en la terraza. La cerveza templada y la copa igual.
No volveremos

Restaurante ubicado en una tranquila plaza muy cerquita de Plaza Elíptica. Disfrutamos de una experiencia muy agradable, con camareros atentos y un servicio de diez; no tuvieron problema en sacarnos un cuenco con agua para el perro, un detalle. Los aperitivos, muy buenos, especialmente las patatas revolconas con torreznos. Los precios un poco elevados, eso sí: 4,50€ por una jarra de medio o 2,70€ por un tubo de 20ml de cerveza me parecen algo caros. Volveremos a comer o cenar, los platos que servían tenían buena pinta.

Excelente servicio de todo el personal, en especial de Renata, muy buena paella y mariscada. Muy pendiente a todos los detalles, la ambientación del lugar bonito. Siempre que he ido he comido muyyy bien.

Muy mala calidad y muy caro. No lo recomiendo en absoluto. Fritos mal hechos con aceite sucio que da mal sabor.

El 24 de septiembre de 2020, volvimos un grupo de amigos y volvió a ser decepcionante la calidad y el precio, además últimamente el servicio ha bajado un pelín, aviso a navegantes. Hemos vuelto y no ha mejorado nada, es más subida de precios, mal trato por qué no les pagan a los empleados, peor calidad.un desastre.