Restaurante Marisquería Casa Valadouro, Alcorcón
Direccion | C. Carballino, 21, Alcorcón, Madrid | ||||||||||||||
Telefono | +34 915 42 50 70 | ||||||||||||||
Horas |
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Sitio web | www.restaurantevaladouro.es | ||||||||||||||
Categories | Marisquería, Restaurante familiar, Restaurante mediterráneo, Restaurante de cocina española, Bar de tapas | ||||||||||||||
Clasificacion | 3.7 48 opiniones | ||||||||||||||
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Restaurante Marisquería Casa Valadouro opiniones
48Excelente menú diario a muy buen precio así como mariscadas y parrilladas. Buen servicio y trato agradable. Recomendable.
Gambas plancha y pulpo muy ricos. Navajas chirriaban un poco por la arena pero en general muy bien.
Me gustó mucho el sitio, dispone de una gran terraza e hicieron lo posible para poder quedarnos a comer fuera aún habiendo reservado dentro, por lo tanto el trato al cliente es correcto. Los precios bastante bien pero depende lo que elijas, respecto a la calidad o preparación del plato. Por ejemplo el cachopo "relleno" de queso de cabra, piquillos y cebolla caramelizada.fatal. Eso si la parrillada de marisco muy rica, recomendable! Al igual que los postres son riquísimos, tarta de queso con dulce de leche no dejéis de probarla, exquisita! Tienen menú de fin de semana a buen precio. Volveremos!
Muy mal servicio. Quisimos tomarnos unas cervezas y después de estar esperando más de 20 minutos a que nos tomasen nota, nos levantamos y nos fuimos a otro sitio. Y eso que sólo había 3 mesas. Cuando tengan todas las mesas llenas no me lo quiero ni imaginar. No vuelvo.
Fuimos atraídos por los buenos comentarios, pero en nuestro caso las expectativas superaban con creces a la realidad. Pedimos para 3 fritura de pescado y mixto de carnes. Los ingredientes de la fritura no eran frescos y estaban excesivamente rebozados y fritos. La ración de carne contiene más patatas que carne y también estaba demasiado pasada. Mi gofre de postre resulto incomible por la dureza del mismo y a pesar de pedirlo y servirlo con sirope (3.80€) a la hora de cobrarlo nos cobraron el precio de gofre con helado (4.50€). Ni lo recomendamos ni volveremos.
Buen sitio para tomar alguna mariscada. Su punto fuerte: la ubicación. Centrado en un parque crea una buena ambientación sobretodo en verano para aprovechar la terraza.
Marisco fresco. Hecho en su punto. Exquisito. Repetiremos.
Y ya llevamos cuatro veces y continúa siendo referente para mi.
Mi familia y yo comimos ayer en este lugar.
El marisco estaba bueno, pero quizá para tanta gente, se me hacía poco lo que venía en la ración.
Tardan bastante en traer la comida entre plato y plato. De hecho, la mesa que teníamos al lado llego después y terminó antes.
En mi caso, pedí menú de fin de semana: 18.50 euros, si no recuerdo mal. Céntimos arriba o abajo. El entrante era una ensalada: tomate, lechuga y cebolla. Muy normal, vaya.
De primero pedí unas setas a la planta salteadas con pimiento y lacón (en foto). Tengo que decir que el sabor no era malo, pero sí que era desagradable el hecho de que cada mordisco tuviese tierra y demasiado aceite.
De segundo, me pedí bacalao a la gallega con pimientos rojos, patatas cocidas y cebolla frita (adjunto foto también). Mejor no hablo de la presentación, que es bastante mejorable. El caso, es que mi bacalao no estaba jugoso como uno se espera, sino seco. Era cola y no fueron cuidadosos con el tiempo de cocinado. La cebolla frita la pusieron a un lado del plato en un montoncito, lo cual no sé hasta qué punto tiene sentido. Estaba un poco correosa. Aún así el sabor del plato en general era bueno.
Por último: el postre. Elegí crepes con sirope de chocolate y nata. El sabor era bueno, pero la presentación muy mala. La nata se estaba derritiendo en el sirope y, a su vez, los barquillos que le pusieron encima hundiéndose en la nata.
De forma general, veo excesivo el precio por cubierto, al menos el de los fines de semana. 18 euros y pico. No cuidan la presentación, pero el sabor de la comida es bueno. El sitio está limpio y es agradable. El servicio es un poco lento, pero si está lleno supongo que sea normal.
Por último, decir que hay que llamar para reservar, o al menos es recomendable hacerlo ya que había mucha gente comiendo y las mesas libres que quedaban eran de reservas.