Tapas Bar La Roux, Alcobendas

La cómoda muy rica pero está muy mal insonorizado y el comedor es una locura de ruidos. Coincidí con una cena de chavales y fue un horror. Estaba deseando irme. Tendrían que hacer algo para que no haya tanto eco y poner algo para absorber el ruido de fondo

Todo regular, fui a comer a última hora, se le acabó el jamón y el queso y fueron al chino de al lado a comprarlo. Por lo menos fueron resolutivos.

Muy amable la camarera. Pedimos 2 dobles de cerveza, nos traen un plato de patatas fritas de bolsa, lo pone en la mesa, nos deja las cervezas y se lleva el plato con las patatas.

De un domingo a otro me dicen que los precios han subido? Si siguen así perderán más clientes como yo.

Llevaba bastante tiempo sin ir y veo que han mejorado las tapas, sirviendo 2 productos diferentes por persona, pero el menú, que ha bajado de precio (solo 10,50€) es muy simple y casi sería escaso para alguien de "buen comer". Cubre las necesidades básicas y se pueden elegir platos sanos, nada especial ni original.

Acabo de tomar un desayuno de tortilla, café y zumo por 8€ y otro café total pague 9,50€ da igual si lo pides separado o desayuno completo según explicación de la camarera me parece que exageración de precios y encima se enfada cuando le pido el detalle de la cuenta pero cuando lo vendió era maja.

Servicio lento. Nos fuimos sin pedir nada de cena porque desde que nos dieron el menú hasta que volvieron por nuestra mesa pasaron más de 20 minutos. La cerveza que pedimos no estaba fría. La terraza está muy oscura. Traen aperitivo con la cerveza.

El camarero rubio del turno de domingo es lo mas vago que he visto en mi vida…. Me solto que me esperase q ahora lo ponia su compañera; cuando el tio estaba ahi a dos manos …

la falta de limpieza e higiene q se notaba a simple vista; costaba dar pasos de lo pegajoso q estaba todo; parecia espinete en una cama de velcro

Tardan mucho en atender. He tenido que pedir tres veces para que me sirvieran. Pongo dos estrellas en vez de una, porque al menos tenían Mahou.

Las tapas están de muerte. Los camarerxs son muy simpáticxs y la atención al cliente fue perfecta.
(Recomiendo que probéis las patatas mixtas, de roquefort y alioli, y las alitas, están riquísimas).

Nada más puedo reseñar que me tomé un simple café y me fui porque la limpieza deja mucho que desear.

Una única persona, eso sí simpática y agradable, pero sola, para el salón, la terraza y creo que la barra

Pues no me gusta la camarera que tienen, parecía que no tenía ganas de trabajar un cero por ella

Zona tranquila para poder tomar una cerveza, pero los aperitivos deben de mejorar bastante

Hoy había de menu entraña de segundo y el tamaño dejaba mucho que desear me tome después café y copa y sinceramente me pareció un poco excesivo el precio

Bar de cerveceo. La terraza es comoda y se distribuye en un espacio grande. Las cervezas las acompañan con tapas normales.

He presenciado una situación lamentable. En una mesa aledaña unos chicos han reclamado la factura que pensaban incorrecta y una de las camareras se ha quitado la mascarilla y ha increpado a uno de ellos. Una falta de profesionalidad sin excusas. Una pena p porque el resto del servicio ha sido muy bueno

Hoy he tenido una falta de respeto en este bar. Una persona que trabaja allí se ha quitado la mascarilla, con el peligro que repercute en la situación actual, para avisarme de que no estaba en lo correcto sin saber la circunstancia que había ocurrido, una lastima cuando sus compañeros nos han tratado fenomenal.

Un trato de esta persona que se ha negado a dar su nombre, la cuál era una camarera que estaba dentro y salió como un rayo para faltarme al respecto.

No volveremos y os recomiendo que a ninguno volváis.

Terraza muy chula, espaciosa y soleada. Personal muy amable y atento. Buen aperitivo. Los platos contundentes, con muy buena presentación y muy ricos. ¡¡¡Seguro repetiremos!
. Repetí unas semanas después y fue una experiencia LAMENTABLE. La encargada estaba sentada en la terraza pasando de la clientela con una de las camareras, otra chica y un bebé; las mesas desatendidas y sucias; tuvimos que entrar para pedir después de un rato largo esperando sin que nadie viniera; ni aperitivo ni nada; en el local 3 trabajadores charlando y mirándose las caras mientras el cliente espera fuera; viene luego una chica a ponernos las bebidas (ya abiertas) con los hielos derretidos, sin saludar y sin ganas.en fin, un desastre y una decepción absoluta. ¡Qué pena, cómo se están cargando la hostelería! Luego quieren trabajo, derechos, etc.y esto, en plena pandemia.

Bar de tapas sin tapa, la atencion al cliente es nefasta, no te ponen tapa salvo que la pidas y el sabor es pesimo, no lo recomiendo