Trasmontana, Madrid

Tenía una reserva para las 14: 30 confirmada hace una semana y cuando llegamos nos dicen que no la tienen anotada. La reserva era para en la terraza que tienen acondicionada.
Finalmente nos meten en el salón interior en una zona de paso en la que continuamente tenía que mover la silla para dejar paso a los camareros.
Pedimos pulpo a la gallega, estaba soso (se les debía de haber olvidado añadir sal en la cocción). También pedimos bacalao y cuando nos lo trajeron estaba todavía congelado por dentro. Se lo devolvimos.
A todo esto, eran ya las 4: 30 y todavía no habían terminado de servirnos todos los platos pedidos.
Mientras que estábamos nosotros en el restaurante hemos podido presenciar el malestar de varios grupos de clientes por el trato recibido. En concreto, pretendían meter a un grupo de 7 personas en un espacio que apenas entraban 4. Este grupo también había hecho su reserva hacia una semana y después de tenerles esperando 45 minutos les pretenden acomodar en ese espacio en el que no entraban.
En fin, con su falta de organización y profesionalidad han estropeado la comida familiar de muchas personas.

No recomendable, no son serios teníamos reserva de mesa a la 14: 30 nos dieron las 15: 40 y nos pusieron una mesa para 6 personas y éramos 7 encima un salón para 4 mesas y habían instalado 7 mesas sin respetar las medidas covid, así que nos fuimos.
La responsable de distribuir las mesas muy desagradable

Buenisima la atención camareros amables y atentos, la comida muy rica y buen sabor, local muy bonito

Mismo restaurante- nuevo dueño preocupado que calidad precio sea excelente. Todo 10,100% recomendable

Excelente trato al cliente, muy detallistas, siempre pendiente de todo, la comida de 1 al 5 le doy un 8 vinos portugueses al % cerveza portuguesa etc, etc.

Estuve por la noche, la terraza está muy bien, y a pesar de que la atención fue agradable se nota la falta de personal los camareros tardan demasiado en atender, la terraza entera de personas no tienen mucha distancia entre mesas fatal fatal.

Fatal. Un pinchazo en mayúsculas. Lo que me sorprende es ver hasta buenos comentarios. Creo que sólo salvaría a un camarero que fue amable, el resto, no merece ni calificación, el otro camarero fue desagradable al máximo.
Y sobre la comida, especial mención al precio de los calamares de plástico, incomibles, recalentados y demasiado hechos, por no decir requetostados. Una tomadura de pelo que, encima que se pidieron lo primero de todo porque eran para un menor, vinieron lo último, es decir, a los postres y después de varios recordatorios al personaje que atiende las mesas. Y quiero dejar claro que, todo lo que tengo en contra es sobre su falta de profesionalidad, nada más que eso es lo que crítico hacia su persona.
Indignada total por lo que pagamos para la cena tan pésima que tuvimos que sufrir.

Es una pena que la profesionalidad de los propietarios y la riquísima cocina, se vea empañada por el trato de los camareros que últimamente deja mucho que desear. No se puede ir de PREPOTENTES por la vida.

Estuve hace días de paso y me vine a este restaurante, El sitio súper agradable, la Comida muy buena, el trato de los camareros excelente, nada por que quejarse volvería siempre.

La comida está bien los camareros no son muy amables y si no te conocen te traen el peor aperitivo que encuentren
El dueño es una persona educada y amable

Excelente sitio mis agradecimientos a todo el equipo, estamos encantados con la atención y la calidad del servicio, muchas gracias, hasta pronto.

Excelente servicio, agradable lugar y comida deliciosa, si visitas por primera vez Madrid, no se puede dejar de ir a ese lugar! Y los camareros son los mejores?

Excelente servicio!
Buena atención de parte de los camareros que llevan por nombre alejandro y cesar. Quedamos encantados.

Con la comida, el local, los propietarios.

100% recomendado para pasar una velada agradable.

Un poco caro.
No hay opciones para ir de tapeo y probar la carta, solo platos de gran volumen

Excelente lugar buena atención exquisita comida y la mejor atención de los camareros Alex y Cesar, super recomendado.

Terraza agradable. Platos normales, de los que tampoco te hacen volver a buscarlos. Turno de cena de hora y media. Si cuando termina el tiempo hay alguna mesa vacía fuera del cenador, se puede hacer algo de sobremesa, si no, hay que irse. Esto es incómodo en un sitio de terraza, la verdad.

Fuimos tras el confinamiento toda la familia a reencontrarnos. Íbamos algo tensos, pero las medidas de seguridad nos fueron relajando. Todo muy limpio. La comida buenísima.

El bacalao está esquí sito. Y la carne a la piedra muy buena. Las raciones abundantes y relación precio calidad, esta bien. El menú diario muy bien

Conozco el restaurante por sus desayunos, comida y raciones. El trato es exquisito, desde el primer día llamo mi atención, algo que hoy se tiene que saber valorar, la comida estupenda, las raciones son bastantes abundantes, la comida estupenda, lo mejor, siempre te aconsejan, el bacalao estupendo, soy fan de las verduras a la parrilla, creo que el precio en función de la calidad que ofrecen es muy bueno, y el precio es correcto con la gran calidad que ofrecen.

Un vino escasísimo, de calidad regular, y trato diferente a otros clientes que serán habítuales