Zíngara, Madrid

¡Espectacular! Entra en un comedor sencillo pero suntuoso, cubierto con telas y luces en el techo que cuelgan para dar la impresión de una tienda gitana (de ahí el nombre del restaurante). El bar es muy bueno: los cócteles ingeniosos y bien equilibrados son fáciles de apreciar, y la lista de cócteles sin alcohol es tan larga (y tan buena) como los cócteles. La comida fue innovadora e hizo cosas increíbles con todos los ingredientes vegetarianos. Con demasiada frecuencia, los restaurantes vegetarianos de este nivel culinario son completamente veganos, pero el uso de queso auténtico en algunos platos los hace destacar.
Los buñuelos de algas saben de alguna manera a pescado con patatas fritas. Las costillas de maíz eran las favoritas de todos: te comes los granos de las "costillas" de la mazorca y el sabor era excelente. El flan con dulce de leche quedó perfectamente ejecutado.
El servicio es atento y sin prejuicios. No es barato (probablemente gastarás alrededor de 50 € por persona si pides una bebida), pero tiene una buena relación calidad-precio en comparación con otros restaurantes elegantes (no vegetarianos).

Llegas a la puerta y al entrar te cambia el chip. El local es muy bonito y transfiere calma y buena energía.
Las responsables de sala eran muy agradables y educadas.
Cogimos diferentes platos para compartir y destaco los buñuelos de algas (aunque me imaginaba una apariencia diferente, no los había comido nunca así y me encantaron), la palta estaba rica y los noodles no me acabaron de convencer pero sí a mí compañero. Ya sabemos que para gustos colores.
Pedimos postre, no me parecieron nada fuera de lo común pero de sabor me gustó el crumble.

La comida y servicio impresionantes, tiene un precio elevado, pero lo compensa con una calidad muy buena y un servicio impresionante, la camarera muy profesional y atenta al mínimo detalle. La pega es que quizás estábamos un pelín cerca entre las mesas.

Toda la comida muy rica, con sabores de lo más variados y vanguardistas.
De los platos que probamos el que más nos gustó fue la berenjena.
Los postres deliciosos.
Un ambiente excelente tanto para ir en grupo como en pareja de forma romántica.
El personal muy atento y amable.

El ambiente es muy especial y el servicio es muy atento.
La comida estaba riquísima; pedimos los cócteles que tenían fuera de carta, la palta, la chipa, los noodles y la causa. Estaba todo muy bueno pero nadie nos avisó de que la causa pica mucho y yo no la pude tomar: (

Abril 2023: acudimos a cenar después del teatro. El local es impactante en su decoración: alfombras colgando de las paredes, sillas con respaldos de pandereta, papel pintado en pared de William Morris, plantas, luz cenital y velas. Parece una jaima lujosa aunque simule una caravana.
Nos ofrecieron cócteles que no quisimos. Bebimos vino blanco de Rueda. Tienen un barman que los prepara en una barra Preciosa.
La carta es pequeña y al leerla te confunde un poco. Trajeron una crema o paté de boniatos con miel de caña muy delicada.
Pedimos los saam de crema de almendras sobre hoja de shiso con aguacate y salsa de tamarindos. Muy rico, fresco con mezcla de sabores sorprendente. Lo que más nos gustó.
Luego un principal cada una: sorrentinos (se nota que son argentinos) rellenos de ricotta y espinacas y la milanesa de berenjena, que es una berenjena cubierta de dos quesos: granna padano y provolone (Nuevo guiño argentino) empanada con cereales y con praline de dátiles y cacahuetes con passata de tomate. Muy rica!
Estábamos tan llenas que no pedimos postre.
Comida muy sabrosa, pagamos 33€ por persona. Quizás un poco alto.
Servicio amable y acogedor con explicaciones de los platos.

Todo genial, pero habiendo reservado con un comentario de nuestro 7º aniversario y que además 2 pax nos gastemos más de 100€, no hubiera estado mal algún detalle por parte del personal.deja quizás mucho que desear en esos aspectos, trabajo también en la hostelería durante muchos años y también se cómo hacer que un cliente dándole algun detalle por pequeño que sea, vuelva al establecimiento a seguir consumiendo! Lo dejo ahí como reflexión.

This place is so great! The ambiance is very cozy and the waiters are super nice. John waited my friend and me's table, and he was spectacular! I couldn't recommend this place enough. I will 100% come back! Thank you for a great time, Zingara, and a very special thank you to John!

Muy rica la comida, que al final es lo importante. Aunque veníamos con cierta reticencia al ser comida vegetariana (a veces cara para lo que te están sirviendo) nos sorprendió para muy bien porque eran platos muy sabrosos y elaborados, tanto los salados como los dulces.

Espectacular. Maravillosa la palta, la patata baba increíble. La mecha y el milhojas de berenjena. Y para rematar un cremoso de aguacate de postre. Todo ello en un local sumamente acogedor y con una atención de 10. Disfrutamos. Muchas gracias

Comida vegetariana muy elaborada, nos encataronnlas patatas y la berenjena, y con unos cócteles riquísimos! Además el sitio es precioso

La atmósfera, el servicio, su cocina y los cócteles hacen un mix que convierte este espacio en el vegetariano imprescindible de Madrid.

Fue nuestra segunda visita y no será la última.

Un ambiente un tanto retro, con una decoración cálida y muy agradable.
El personal muy atento y dispuesto a hacernos la velada agradable, déjate aconsejar, no intentaron vendernos más sino que fuese una cena placentera y que saliesemos satisfechos y con ganas de volver, se trata de hacer clientela no de engañarte una vez.
La comida era sabrosa y un punto por encima de la mayoría de vegetarianos que he visitado.

Que no te asuste el término vegetariano, la comida esta a la altura de cualquier local sea vegetariano o no.

Vas a disfrutar del sabor, la textura y la presentacion, los platos tienen sabores complejos y acoplados desde los más frescos hasta algunos más invernales, al menos los que yo probé.

Nos comentaron que cambian bastante adaptándose a las temporadas.

Personalmente un sitio muy recomendable.

El mejor lugar de vegatariano de Madrid! La comida increíble, súper original los platos.
El servicio excelente, y de los mejores tragos que he probado en Madrid!
Un sitio súper original y con mucha estilo.
Sin duda volveré!

Increíble la experiencia, el lugar, la comida. Explosión de sabores. Te traslada a otro lugar. La calidez de que esté atendido por sus dueños!

Me ha encantado. El sitio súper bonito y especial. La comida está buenísima y llena de sabor. La atención de 10. Repetiré seguro.

Una experiencia realmente espectacular. El ambiente te teletransporta a un lugar lleno de magia, con una ambientación cuidada hasta el último detalle. Fuimos 8 personas y probamos casi toda la carta. Cada plato resultó ser una experiencia de sabores. Sin duda paso a ser mi lugar preferido en Madrid. Sin lugar a duda volveré varías veces.

No sé como describir la fiesta de sabores que es este lugar. Todos en algún momento deberían poder probar los cócteles de John que son excelentes, los entrantes deliciosos y los platos que me hicieron olvidar que suelo comer carne. Recomiendo las patatas Baba, el chipá, la berenjena y para el postre el cremoso de aguacate.
Hermosa experiencia y atención?

Lo mejor es que el local es realmente bonito y que la comida está Rica, el problema? Las raciones son bastante pequeñas para el precio que tienes y nos quedamos con hambre y pedimos bastante.

Carta corta pero con platos interesantes

Si eres de comer, merienda fuerte.

Excelente sitio. La comida llena de sabor con gratas sorpresas como las patatas baba o el brócolis; el postre (cookie de chocolate) espectacular. El servicio fue maravilloso. La decoración te transporta a otra época y el sitio te aísla del bullicio y el ruido. La música bien elegida y a un volumen perfecto para poder hablar con los demás miembros de la mesa.