Casitas-Refugio La Purísima, Requena

Un lugar encantador, hemos estado muy a gusto. Teníamos todo lo que podíamos necesitar. Los dueños encantadores, nos informaron de las rutas cercanas para hacer. Tenemos dos perritas y han disfrutado mucho, las casas están retiradas y pueden campar libremente. Muy recomendable para descansar en la montaña y desconectar. Volveremos.

Es un lugar encantador y muy acogedor y si buscas desconectar de la ciudad es el lugar ideal, los dueños son majisimos y atentos y en la casa no faltaba de nada menos lo que te tienes q llevar q previamente te lo dicen los dueños y por supuesto mis perritas se lo pasaron bomba montaña arriba y abajo y sueltas todo el día.
Sin duda repetiremos

Fin de semana en casa para 6 personas.
En general todo bien, aunque el espacio es un poco angosto para este número.
La casa era la Tortuga. 2 habitaciones y arriba de la sala un altillo un poco forzado para otras dos personas justitas.
Tienes que llevarte ropa de cama y toallas, lo cual a mí no me molesta si lo sabes de antemano.
En cualquier caso, el trato fue excelente y el entorno fenomenal.
Muy cerca del casco urbano de Requena.
Seguro que vuelvo.

Es el mejor sitio del mundo. Desconecto, respiro hondo y soy feliz. Conozco a los dueños desde que empezamos a ir en familia desde que tenía 4 años, son personas encantadoras.
A las Casitas sólo les falta tener ropa de cama y alguna comodidad extra, pero los que sabemos a lo que vamos, estamos genial. Gracias Pedro y María Luisa por seguir conservando este lugar tan especial.

Llevamos viniendo hace años buscando tranquilidad y senderismo. Los dueños encantadores y las casitas, aunque austeras, cumplen su función, todo muy limpio. Nuestra perra disfruta muchísimo.

Me encanta el ambiente natural, el paisaje y la paz que se respira. Vuestra atención y dedicación son uno de los mejores recuerdos que nos llevamos del lugar. Ideal sitio para desconectar.

Somos un matrimonio con 2 niñas pequeñas y nuestra perrita Shaky, buscábamos un sitio tranquilo, cerca de la naturaleza, con intimidad y que pudiéramos llevar a nuestra mascota. Todo ello lo encontramos en La Purisima, las casitas tienen las instalaciones suficientes para lo que buscábamos y nuestras hijas estuvieron genial, sobre todo en la piscina que estaba realmente cuidada y, aunque tenía un aforo prácticamente completo, nunca estuvo masificada. El dueño, Pedro, se porto maravillosamente, le pedimos un microondas y en la misma mañana nos lo consiguió, ademas de asesorarnos sobre la finca y las actividades. Repetiremos seguro para navidades y para otras fechas, seguramente vayamos con más familia la próxima vez. Enhorabuena por el sitio os lo recomiendo.