Saona, Valencia

La comida fue super buena! Venimos desde belgica con un grupo de 8 y fue el lunch perfecto!
Pagamos entrr 10 y 20 euros por 3 platos super Rico y bebidas
El servicio fue top! Rapido y siempre con una sonrisa

Muy buen servicio! La comida increíble y sirven muy rápido. Camareros súper agradables sobre todo Alejandro y Jessi Recomendado 100%

Una cadena como Saona no se puede permitir el lujo de tener la máquina de aire goteando que bañaba a los comensales, el servicio extremamente lento

Mi experiencia en el restaurante Saona de la Gran Vía en Valencia fue, en su mayoría, una auténtica delicia culinaria. Los platos que tuvimos el placer de probar, como el surtido de verduritas rebozadas, el costillar tierno y la tarta de queso, resultaron ser auténticos manjares que dejaron un recuerdo delicioso en nuestro paladar. Es relevante destacar que mis compañeros de cena también quedaron igualmente encantados con sus elecciones de platos, lo que demuestra la calidad de la comida en Saona.

Sin embargo, uno de los aspectos que empañó ligeramente nuestra experiencia fue la lentitud en el servicio. A pesar de comprender que el restaurante estaba lleno y que los cocineros y camareros podrían estar desbordados, esperar aproximadamente tres cuartos de hora para recibir el primer plato no fue precisamente agradable. A pesar de esta demora, nuestro aprecio por la excelente comida nos lleva a considerar volver al restaurante en el futuro, con la esperanza de que el servicio haya mejorado en términos de eficiencia en nuestra próxima visita. En definitiva, Saona en la Gran Vía de Valencia ofrece una experiencia gastronómica memorable, aunque podría beneficiarse de una mayor rapidez en el servicio para perfeccionar la experiencia en su conjunto.

Las porciones del menú son claras, pero muy sabrosas. Definitivamente habríamos bebido más si el camarero nos hubiera pedido más a menudo. En realidad no estaba pasando mucho.

La verdad es que hace tiempo que soy clienta de esta cadena, pero lo cierto es que están yendo a peor, tanto en platos como en servicio. No sé quién es la persona que decide los platos, pero los cambios han hecho que la calidad y el producto sea nefasto. Las gyozas las hacen ahora crujientes, un error totalmente, y sin prácticamente salsa, que era lo mejor del plato.
La pluma ibérica igual, sin suficiente reducción de Pedro Ximénez a pesar de pagar un suplemento de 2€ cuando antes iba incluida en el precio del menú. Precio del cual, por cierto también ha subido.
Y por si fuera poco, pedimos agua, nos la sirvieron DEL GRIFO y nos cobraron 2,10€. ¿Perdona?
Tengo claro que no volveré, vaya, una decepción total.

Llevamos más de media hora esperando a que se levante una mesa. Nos han dicho que no hay personal, no pueden con todo. Falta personal y organización.

Han bajado las raciones, han subido precios y han suprimido platos de la carta de diario (como las croquetas de pato o el costillar.). Se puede ir, pero ya no tiene el encanto de antes

Ha perdido mucho, la comida no es lo que era y el servicio lento es poco, lentísimo, entre plato y plato nos hacía la digestión. En fin, un sitio al que no volver más.

Es la tercera vez que me preguntan por este sitio. El restaurante estupendo, el preguntador agotador

Recomendable
Fui con 2 amigos (teníamos mesa ya reservada) y les dije que llegaban tarde los 2 amigos y no hubo ningún problema.
Los 3 pedimos el menú del mediodía entre semana (era un viernes) y estaba todo muy bueno, muy recomendable las croquetas de pato.
El único punto en contra, las raciones (excepto los postres) deberían llevar un poco más de cantidad aunque aumentaría los costes pero para nosotros 3 no fue suficiente cantidad.
Nos atendió muy bien un camarero, su nombre es Vicente Aguilar, actitud intachable y profesional.

Comida estupenda como en todos los Saona. Este en interior es un poco estrecho y se notan más apretadas algunas mesas. Prefiero otros Saona, aunque la atención genial.

Os recomiendo reservar con bastante antelación si queréis comer dentro, ya que hay muy pocas mesas.

Solo puedo decir cosas positivas.restaurante con decoración estilo mimbre, cestas, madera y paja. Muy mediterráneo
Comida variada, rica y muy bien presentado
Camareros rápidos y eficientes
Precio adecuado

Muy buen sitio para cenar, nos ha atendido Laura, una chica que nos ha dado una buenísima atención, ha sido súper amable y nos ha solucionado un problemilla que hemos tenido con la reserva. Con una atención así te dan ganas de volver sin ninguna duda:)

Fuimos a comer por el menú del día por 9,90€ (entre semana9 y no ibamos con muchas expectativas y salimos gratamente sorprendidos, mucha variedad de platos principales y entrantes y buenos postres, mucha cantidad, y buena relación calidad/precio, era la primera que ibamos y volveremos. Camareros muy majos, especialmente los chicos. 9/10

Integran la cocina asiática con la mediterránea, muy limpio, el servicio correcto. No son lentos

No somos de Valencia pero ya nos lo habían recomendado y efectivamente acertaron Todo estaba muy bueno y los postres, increíbles. Tienen un menú bastante competitivo respecto a la calidad que ofrecen. Sin duda volveremos.

Delicious, delicious, delicious. For the set menu (starter, main and dessert) you’ve got a number of choices. In our party, we had the octopus (divine), tempura prawns (legendary), truffled cannelloni (could eat this every day) and Iberian ribs (super succulent). However, the big surprise was the blueberry cheesecake. Get this, even if you’re not a cheesecake fan, you’ll be converted.

Nos ha gustado mucho, la comida muy buena y las camareras muy atentas. Estuvimos dentro del local, eran fallas y había un menú específico.