Taperia Ca Vicent, Castellón

Un desastre absoluto y un timo a escala grupal. SI ERES MOTERO NO PARES AQUÍ Y MENOS SI VAS EN GRUPO. Son unos timadores y abusones que por un almuerzo pagamos casi 25€ por persona. La cuenta fueron más de 400€ y encima un lio tremendo entre las camareras. Nos sentimos estafados y engañados y no vamos a volver jamás.

La única pega es que el cordero estaba un poquito frío, pero un despiste lo puede tener cualquiera. Sitio increíble con buenísimas vistas, pensábamos que iban a haber muchas moscas sin embargo no fue molesto. Las camareras muy atentas y siempre pendientes de que no nos faltase nada en la mesa. Platos abundantes y un precio muy acorde con la calidad.

Local sencillo, cuenta con una terraza amplia y fresca, la atención rápida, amable y atenta, la relación calidad, cantidad y precio de la comida es buena, quedamos satisfechos con lo que pedimos.

Comida en abundancia y calidad aceptable, precio dentro de lo normal, a la hora de servir las tapas deberían pensar en sacarlas escalonadas, las sacaron muy seguidas y casi no cabían en la mesa; en cuanto al personal muy atento y amable.

La 1a vez que fui a la niña le apareció un cristal en el postre, se lo dijimos y como si nada, ahora el postre lo cobraron… la segunda vez q fui (no sé xq volví, supongo q x la terraza) me salió un pelo negro revuelto en el revuelto (valga la redundancia), entre le devolví el plato a la camarera y q estaba lleno, y no solo no nos sacó otro, si no q también cobraron el plato devuelto y como si no hubiese pasado nada. No me ven mas allí, terrazas hay en muchos sitios y sin cristales ni pelos en la comida

Muy mala experiencia, el personal del restaurante dejó a uno de sus clientes habituales fumar en la terraza, el cliente llegó después de nosotros y se sentó en la mesa de al lado, cuando nos quejamos el cliente amenazó a mi marido. La carne a la brasa regular, pedí chorizos y me trajeron chistorra, el secreto pequeño y delgado, la panceta lo mismo, queríamos pedir más, pero después de la mala experiencia en la terraza nos dio miedo que nos fueran a escupir la comida. Lugar para no volver.

Buena experiencia, desayunamos varios días y nos encantó, volveremos sin duda, muy recomendable.

Buenas vistas al monte, el trato al cliente por parte de los camareros es tal cual como si estubieras en sudamérica.
El precio y menú no están nivelados

En arrivant on a impression que les plats sont simple en fait la cuisine est bonne et élaborée éviter le menu a 35euros un peu cher prenez a la carte l agneau au four est très bon et le gâteau au chocolat. Aussi

No he estado nunca en un sitio en el que te cobren las aceitunas que te comes acompañando a la bebida.hasta que he consumido aquí, 1€ por un bol pequeñito de aceitunas que encima no están ni buenas y además no te dicen que las cobran al pedirlas pues es algo muy poco corriente cobrar algo así, la verdad me pregunto si también cobran los cacahuetes. ¿a dónde vamos a ir a parar? Lo que está claro es que no pienso volver

Venimos casi todos los días a almorzar y nos encanta. Siempre brasas y superatentos Todo bueno y el entorno espectacular rodeados de naturaleza al aire libre. El personal es muy simpático y atento.
Mientras estén, vendré. Muy recomendable

Me querían cobrar de medio bocata, vino con gaseosa y café 10,60€, pero tras mi queja lo han bajado a 9,10€.
NO voy a volver más.

Lo bien ubicado que está el sitio, y lo mal que lo hacen.
Está mañana medio bocadillo que pido con carne a la brasa, y resulta que esta la tenía que buscar con lupa por dentro del bocata. Lo digo, y resulta que les da igual. Y a la hora de cobrar no es que sea barato.
El ser humano somos los únicos que tropezamos varias veces con la misma piedra, porque han sido unas cuantas ocasiones en las que me he sentido engañado.
Cada vez te cobran diferente, sin enseñarte el tiquet, siempre engañándose a su favor.
La educación de las camareras es muy mala. Que poniéndome en su piel las comprendo, porque hay tantas cosas de las cuales un cliente se les quejará, suciedad, mal servicio y precio (que te cobran como si estuvieras en un local de mantel de tela, y estos no te limpian ni la mesa de plástico) que con el tiempo ellas se pensarán que el cliente nunca tiene la razón.
Alguna vez han sacado refrescos caducados, y si, te lo cambian por otro, aunque eso si, te cobran también el caducado (hay clientes que somos muy delicados)
Aún sin haber mucha gente, son lentos sirviendo y tomando nota. Varias veces (si fuera solo una vez lo atribuiriamos a un mal día) he visto a clientes levantarse e irse pagando solo las bebidas (y me imagino que ni una disculpa se llevaron)

Otra vez (y si, soy culpable de reincidir) quise reservar sitio para almorzar con antelación para un día que es festivo en la localidad. Me dijeron que nunca se reserva para almorzar, aunque sea para un dia festivo, que vaya ese día que tendré sitio. Pues cual es mi sorpresa que un mes después, el día señalado me quedo sin mesa por no reservar. A ti te pidieron perdón? Pues a mí tampoco.

Hoy me han sorprendido gratamente, al recriminar la camarera a unos clientes diciéndoles que no se puede fumar en la terraza. Eso en contraste con alguna rata que suele pulular a sus anchas llama la atención.

Pero bueno, si eres una persona poco escrupulosa que quiere disfrutar de unas buenas vistas y que no sea muy exigente con el trato respetuoso hacia su persona este es un sitio ideal.

Por suerte para ellos está en buen sitio y siempre les irá gente.

Le pongo 1 estrella y no le pongo cero porque no se puede, un pésimo servicio, muy mala atención de las camareras. Hemos tenido que esperar 30 minutos a que vinieran a pedirnos la bebida, cuando ya habíamos entrado a preguntar varias veces. Una camarera novata nos trae una sangria y te trae unas olivas. Al nada viene otra camarera (que seguro que con más experiencia) y de malas formas le reprende a la camarera novata por que dice que como no hemos pedido olivas que no las traiga, aparte que no las hemos pedido y que se cobran, cuando de normal las olivas que te traen con la bebida suele ser gratis. Vamos a pedir para comer (a la camarera más experimentada), nos impone el menú de 20€ persona, lo vemos, no nos llama la carta y le preguntamos que si tiene bocadillos, nos dice que no (?) y preguntamos por las tapas, las tapas que tiene tampoco nos termina de convencer por que era las mismas cosas que el menú. Total, como habíamos visto a otros clientes con platos combinados preguntamos por ellos. Nos dice los que tiene y le pedimos dos platos combinados de cordero, a partir de ahí, nos dice que nos tiene que cobrar por trozos de carne, le decimos cuantos trozos, y nos dice que ahora le digamos las carnes como secreto chuletas… (?) a lo que mi mujer pregunta, ¿pero esto no era un plato combinado? Y nos dice que es una bandeja de carne que tenemos que pedir más que el cordero. Decidimos que no queríamos nada, que nos cobrara sólo la sangria por que ya estaba en la mesa, y nos empieza a decir que no, que ahora sí que nos servía un plato combinado. Le decimos de buenas maneras que nos está intentando hacer el lío y que no, que sólo la sangria y listo, nos insiste hasta que al final se cansa y se va por fin. Pero lo peeeeoooorr de todo, es que la camarera en ningún momento nos ha negado el que nos esté haciendo el lío. Hace años veníamos a comer, por desgracia ya no volveremos. Adjunto tíquet de prueba.

Hicimos una parada antes de llegar a Onda. La camarera nos dijo que se podía pagar con tarjeta sin problemas. Al llegar a la barra tuve que comprar un paquete de papas minúsculo y caro que no me apetecían para poder llegar al mínimo.

Tienen dos terrazas además del interior del local que es bastante grande, esta situado a la misma orilla de la carretera y puedes aparcar en la puerta. La comida en general bastante bien, al igual que el servicio.

Restaurante con gran terraza interior al aire libre, una zona trchada con sombra y otra abierta con sombrillas. Brasas, futbolines, amplio, muy bien aireada. Tambien salón interior más pequeño. Bonitas vistas y accesible. Justo detras del Museo de Ciencias Naturales. Recomendado 100%. Personal muy atento y rápido.

Braseria junto al museo de animales disecado de Onda (Castellón), fácil aparcamiento, precios modicos

Restaurante sucio y descuidado, trato pésimo, comida fatal… muy caro… cada vez que vas te cobran una cosa diferente, pides el tíquet lo sumas y te cobran de más… y redondean a beneficio de ellos… no recomendable para nada.
Un almuerzo bocadillo y plato combinado con dos cervezas y cola 50€… timadores!

Un sitio grande y con terrazas, en cuanto a comida y precio no está mal, pero los baños "Fatal", parece mentira que teniendo sitio no este accesible para personas en silla de ruedas al igual que la entrada con un pequeño escalón cuando podía haber rampa.