Oficina de Correos, Barcelona

Muy mal muchas colas hasta de 1 hora y los ordenadores si no les pasa una cosa es otra y te atienden así así a lo mínimo vamos vender lotería si te venden y demás productos como buenos comerciales que le vamos ha hacer es correos por no decir que nunca los paquetes los entregan te dicen que pasan y es mentira papel para que pases otro día y hagas 1 hora de cola no se pagas el envío certificado que debería. De llevártelo a tu casa y lo terminas llendo tu un desastre

Servicio nefasto. He tenido varias malas experiencias con esta oficina. Desde hace un
par de meses el servicio ha empeorado.
La última ha sido la siguiente:
Me dejan un aviso en mi domicilio al encontrarme ausente, en otras ocasiones si en casa no estoy y está mi madre, le entregan el paquete sin problemas anotando su dni. Hoy mi madre ha ido y despues de 45min de espera, con el aviso a correos sin firmar pero con mi dni original, se han negado a dárselo. Dicen que no está autorizada. ¿Si es a domicilio si tiene autorización y si yo le doy el aviso y mi dni original no? Teniendo tanto yo como mi madre el mismo domicilio en el dni? Señores de correos sean un poco más empáticos con sus clientes! No estamos para perder el tiempo de esta manera. Actualícense! P. D. La directora de oficina (miss simpatía) una sra.nada comprensiva, narcisista y dictatorial, si te atiende ella, desiste no la harás entrar en razón y te responderá con prepotencia.

Un autentico desastre en gestión desde hace mas de una decada. Año tras año en los periodos cercanos a las vacaciones de verano y navidades los pedidos llegan con retrasos injustificables de hasta 1 mes. Absolutamente nadie responde ni a correos electronicos ni a los telefonos de atencion al publico, obligandote a personarte en la oficina. Puedes acudir a reclamar hasta en 2 o 3 ocasiones sin que se solucione la incidencia, puesto que a nivel interno tampoco funciona la comunicacion entre oficina central y reparto. Es obvio que la gestion a nivel empresa y oficina local es de verguenza ajena, puesto que no hay un dimensionamiento efectivo ni de la carga de trabajo por zonas (las zonas afectadas son siempre las mismas, las de mayor densidad de viviendas, ya que la carga se distribuye por zonificacion fisica no por carga de trabajo) ni de cubrir las bajas de vacaciones. Todos los años quedan zonas sin cubrir a veces durante 3 semanas a pesar de disponer de una bolsa de empleo propia.