El Jardín de Orfila by Mario Sandoval, Madrid

Maravilloso restaurante y muy bonito. La atención es exquisita y el servicio impecable. Muy recomendable!

Hoy hemos decidido ir a tomar un té a este sitio tan especial, la atención exquisita, el jardín una preciosidad, hemos estado muy agusto, merece la pena visitarlo y disfrutar de su magnífica terraza, un verdadero acierto

Sitio totalmente recomendable, tanto por el entorno como por el servicio. La comida especialmente buena con platos elaborados y de gran calidad. Repetiremos.

Ambiente agradable y romántico, amabilidad de los camareros. Comida muy buena. Totalmente recomendable.

La valoración es debida a varios pequeños fallos impropios del lugar y el precio. Debido al calor pedimos mesa en el interior, hasta pasada media hora no se empezó a notar el aire acondicionado; en la mayoría de los cinco platos, el sabor de fondo era parecido, con un regusto a un curry suave; en el primer plato de degustación los espárragos eran de un grosor pequeño y estaban algo secos; finalmente, debido a un grupo que había en el jardín, el servicio no estuvo bien cubierto.

Si quieres comer un buen asado, recomiendo, este restaurante.
Buen trato por parte del personal, buena comida y presencia por la cocina y sus ayudantes y el local muy bonito, elegante y acogedor.

Muy agradable, elegante, el servicio excelente y el menú muy interesente. El lugar fenomenal. La compañía espectacular!

Un patio muy agradable, con muy buenos profesionales, muy atentos y amables.
Una comida muy bien elaborada y con muy buena combinación de platos.
Merece la pena ir a tomar el brunch.

Un jardín demasiado pequeño, para el n-de mesas que atendían, buen servicio, relación precio calidad aceptable

Una experiencia maravillosa no sólo en el paladar. El servicio atento y el lugar era el paraíso. Fueron testigos de un día inolvidable donde mi novio me pidió ser su compañera de vida para siempre ni qué decir tiene que la respuesta fue afirmativa.

Trato excelente de todo el personal, que sabe encontrar un equilibrio entre la atención y la discreción. Gran amabilidad y excelente experiencia culinaria. La terraza aporta el marco incomparable de tranquilidad y disfrute.

Estuvimos con la familia el día de Navidad para tomar el brunch y ha sido una auténtica decepción. Lo único destacable las ostras y el Moet Chandon que no paran de servir, el resto de una pésima calidad y absolutamente discreto para la categoria del establecimiento. En el buffet habia: macarrones, tortilla de patata, ensalada y algunos embutidos (nada de ibéricos) el segundo plato a elegir entre hamburguesa, arroz y tartar de atún, las raciones minúsculas y tardaron casi una hora entre platos. Los postres tres tipos de tartas y bolleria industrial. La atención por parte de los camareros fue penosa, nos quejamos de que hacia frio y después de varios avisos tuvo que venir el encargado a cerrar una ventana. En definitiva, no hace honor al nombre del chef que avala este restaurante, desde luego, hay muchos mas sitios en Madrid donde tomar un buen brunch y mucho mas barato que aquí. Totalmente desaconsejable.

Restaurante pequeño y elegante, bonito para una cena romántica. Tiene una terracita aledaña que le añade encanto. La comida está buena, aunque no me gustaron mucho las cocochas con gambas cristal. El personal muy amable y servicial.

El evento de Moet es una decepcion. No es una experiencia teatral, ni cinematografica. Solo actua una actriz y dice dos escenas, nada mas. Respecto a la cena, bastante mejorable. Espacio muy pequeño y no hay distancia entre comensales, estabamos hombro con hombro.