Lavapiés Health Center, Madrid

He venido para sacarme la tarjeta sanitaria a las 8: 30 am y me dicen que hasta las 9 nada. Pero veo cómo en mi cara atienden para lo mismo a dos personas. Un personal más que desagradable. Los servicios público como en su mayoría de veces lamentable.y más si eres extranjero.
Cómo si no pagará la SS y mis impuestos cada mes.
Una atención al paciente pésima.

Pésima organización de recepción de pacientes. Terrible atención al público. Los médicos excelentes

Llame por tlf (como 10 veces si que es verdad, hasta que lo cogieron) por un contacto con un positivo. El enfermero me devolvió la llamada a la hora y media para hacerme una PCR ese mismo día. Todo el personal fue muy atento.

Organización de las analíticas muy mal y encima empiezan más tarde de la primera hora a la cual deberían de estar sacando sangre. Por lo demás va tirando el centro como puede y los profesionales hacen lo que pueden.pd: hoy 25/03/2021 adjunto captura de como está la situación para poder pedir cita.esto es un auténtico CAOS y bajo calificación. 10 DIAS PARA PEDIR UNA CITA TELEFÓNICA. Lo siento y no me parece esta situación ni medio normal y quién tenga la culpa de esto debería de subsanarlo.

Nadie responda al teléfono durante dos días en medio de una pandemia.
Cada vez que yo voy aquí, me dijeron cosas differentes acercas de cuando hacer la prueba.

Pertenezco al centro de salud embajadores 41 y estoy muy agradecido al trato que se recibe tanto de medicos, enfermeros, personal de administración, etc.
Los problemas que pueden surgir, claramente por las deficiencias provenientes de la administración del Estado, la superan con creces la profesionalidad y amabilidad del personal del centro.
En momentos como éste, con el Covid, el interés y eficacia no han bajado en lo más minimo, y por tanto es de agradecer la labor que realizan por nuestra salud.
Siempre existe un episodio que puede causarnos mal humor, pero ésto no debe convertirse en arma arrojadiza. Yo siempre me siento acogido y seguro con mis sanitarios, y eso, no es poca cosa!
Muchas gracias

El personal, el lugar y demás estupendo. Lo que me parece alucinante es lo difícil que es contactar con el centro por teléfono. Y ya no hablo de la época Covid-19, si no en general. Nunca he sido capaz de que me cogiesen el teléfono para nada, y he llamado unas cuantas veces a lo largo de estos últimos dos años.

La atención teléfonica es pésima, por su ausencia, digo. No hay nadie que te coja el teléfono y te puedes pasar horas. Debe ser cosa de éste centro porque llevo aquí mas de 15 años viendo como eso no cambia. Fatal!

Organización de las analíticas muy mal y encima empiezan más tarde de la primera hora a la cual deberían de estar sacando sangre.

Atienden a pacientes sin tarjeta sanitaria y sin identificarlo. Acude una persona que coincide conmigo en nombre y apellidos y por error me dan baja médica a mí, con toda la molestia que esto conlleva y con todo el papeleo que he tenido que arreglar con mi empresa. No se molestan ni en comprobar el dni.

No entiendo porq ponen número de teléfono cuando no lo cogen llevo 3 semanas intentando sacar cita porq no he podido acercarme, es una vergüenza

El día 3 de julio de 2019 fui víctima de un robo poco antes del mediodía. Pasé más de 4 horas en la comisaría de Leganitos, sin comer, para cursar la denuncia. Número de atestado 26228/19.

Tuve que dedicar semanas a solicitar de nuevo los diferentes documentos hurtados, habida cuenta de que trabajo a más de 20 km de mi domicilio y tengo además movilidad limitada, que me impide permanecer mucho tiempo de pie o dar más paseos de la cuenta, por los dolores.

Entre ellos, la tarjeta sanitaria.

Llevé el atestado y pedí una nueva tarjeta. Nunca me la habían robado antes. En el documento que me dieron pusieron "EXTRAVÍO". Me di cuenta y, al pasar a recogerla en persona, informé del lapsus: había sido un robo.

La mujer que me atendió me dijo que lo que pasa es que las perdemos y decimos que nos las roban. Le puse el atestado en la cara, desde el otro lado del cristal, para que leyera lo que había pasado. Me insistió y me dijo que lo que ocurre es que no tenemos cuidado y además alzó la voz más de lo necesario para que yo la escuchara (de audición no tengo problemas). Que debían cobrárnoslas. Le contesté que no, ella que sí y yo que no, y ella que sí, y yo que no. (perdí la cuenta).

Que después de sufrir una desagradable experiencia así, te traten y hablen de esta manera, sobra.

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En otra ocasión pasé para realizar un trámite con un volante entregado en la consulta. Me atendió un joven. Tenía varias dudas al respecto. Le pregunté varias veces y me fui sin respuesta. Durante todo el tiempo que estuvo haciendo mi trámite, estuvo mirando al ordenador o hacia atrás, mientras hablaba con otro compañero suyo. No me miró a la cara ni una sola vez y no me escuchó ni contestó.

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Añado que soy personal administrativo estatutario fijo en excedencia del Sistema Nacional de Salud desde 2004. Compañeros: DAIS VERGÜENZA AJENA. Yo antes me sentía orgullosa de decir que había trabajado en la sanidad pública en el grupo de personal administrativo. Ahora paso apuro cuando alguien que lo sabe me lo recuerda.

Eso sí, nunca necesité mampara de protección. En 10 años los dos únicos intentos de agresión fueron de personas con problemas mentales, que no eran responsables de sus actos. Y las discusiones que se tenían, generalmente eran por estar en estado de nervios el paciente por la salud de un hijo o de un padre, que luego no iban a mayores. Se desahogaban y se iban y, como profesionales, lo entendíamos y no le dábamos más importancia.

El resto de los pacientes, los que no tenían alteraciones patológicas de conducta ni situaciones apremiantes, contestaban con la misma educación con la que eran tratados en las recepciones y demás servicios en los que trabajé.

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El resto del personal, normal.

La verdad que no cogen el teléfono nunca, no se para que lo tienen, tardas menos en ir hasta allí, los médicos son grandes profesionales y el personal de enfermería son muy buenos profesionales y super atentos

Maravilloso centro esta gestionado fantástico si algún Facultativo esta ausente te pasan a otro para que te atiendan. Todos son magníficos profesionales que te atienden muy bien. Quiero destacar aquí a mi Dra María Jesús López Rodríguez. Es un médico extraordinario que ama su profesión pone su empeño en restablecer te y se ve que acierta siempre. Es un consultorio fantástico chapeau! Por ellos porque siempre te atienden y si no es con uno es con otro médico pero siempre te atienden no lo dejan para más adelante como otros consultorios. Estoy realmente contenta. Yo decidí quedarme en ese consultorio porque por zona perteneceria a otro pero la gestión de este y el buen hacer de sus facultativos decidí mientras pueda quedarme en el Consultorio Lavapies.

Las 3 personas que tienes al entrar no pueden ser mas desagradable arrogantes y prepotentes. Da asco ver como gente que trabaja a en sanidaf con pacientes te tratan como si fueras un delincuente. Deberian de jubilarse ya que si no tienen la edad ño parecen y dejar hueco a gente con ganas fe trabajar.

El trato de l@s recepcionistas es lamentable. Son racistas, no trabajan y son bastante maleducad@s. Si no fueran funcionari@s, llevarían años en el paro. Una vergüenza. Señor@s, aprendan a comunicarse con respeto!

Vergüenza de atención en recepción. Falta de educación, tacto, motivación, simpatía, en la cárcel te tratan mejor. Para trabajar cara el público hay que tener otra disposición. Parece como si quisieran que los despidan del trabajo.

Es una vergüenza la Atención recibida por la Dra. Carmen Torres Martinez. Viene a la hora que le apetece y le importa más bien poco hacer esperar hasta a 6 pacientes sin ella estar siquiera en la consulta.

Hace unos días vine y esperamos 50 minutos sin tener noticias de donde estaba ya que durante ese tiempo nadie entro ni salio de la consulta. Cuando me decidí a llamar y abrir la puerta, estaba sentadita con su móvil.

Hoy, ya hace 20 minutos que la espero. Tenía cita a las 8: 20 y la señorita aún no se ha dignado a aparecer.

Un claro ejemplo de vaguerio español y de cómo está la sanidad.