Madrid City Tour, C. de Felipe IV

Las paradas de autobús no estaban claramente señalizadas y eran difíciles de encontrar.el precio del servicio y la poca frecuencia de los autobuses no valían la pena. Un conductor casi arranca, dejándonos atrás a mí y a mi esposa, aunque llegamos a la parada antes de que cerrara las puertas. Definitivamente evite esto en los meses calurosos ya que el aire acondicionado es deficiente y sentarse en la parte superior hace demasiado calor. El autobús hop on hop off en la ciudad de Barcelona fue un servicio mucho mejor.

Una manera diferente para conocer la ciudad. Tiene tres líneas diferentes pero depende del momentos la disponibilidad es distinta. Los buses tienen una buena frecuencia y las paradas son estratégicas. Tiene audio guía y brindan folletos con el mapa de la ciudad, lugares para conocer y los puntos.

El clásico bus turístico de toda ciudad, útil el primer día para saber qué visitar.
En Madrid el sol pega fuerte y hace mucho calor por lo que el aire acondicionado y un techo cerrado serían bienvenidos

Excelente tour con Madrid City Tour. Te permite conocer la ciudad rápidamente con ambas rutas (histórica y moderna) dedicando alrededor de 1 hora en cada ruta. Puedes subir y bajar del autobús tantas veces como quieras e incluso disponer de una audioguía que cuenta la historia de los principales monumentos.

Como consejo, te sugiero que preguntes dónde están y cuáles son las paradas, para no perder mucho tiempo y bajarte en el lugar equivocado.

Los autobuses son buenos y cómodos.
Las rutas extendidas son muy bonitas y menos concurridas.
El recorrido nocturno es una experiencia imperdible
Dos pequeños problemas:
La explicación de la audioguía comienza después de pasar el monumento y las paradas son un poco difíciles de encontrar ya que son las mismas que las del transporte público.

Nunca me han gustado este tipo de buses turísticos porque sacan dinero y no sirven! ¡Si quieres ver una ciudad tienes que caminar! Sin embargo, convencidos por mi esposa y mi hija, ¡gastamos 60 euros al día! Y después de un recorrido nos bajamos en el museo del Prado, y a las 20.30 horas después de un cuarto de hora de espera nos dijeron que no pasaban más autobuses, pero en el momento de la compra nos dijeron que el servicio era hasta las 22 horas.: 00! ¡Así que la moraleja de la historia caminamos de regreso al hotel!