Marieta, Madrid

No somos de Madrid.
Viajamos con frecuencia a esta ciudad y una parada obligatoria para nosotros era visitar este lugar.hasta ahora nunca habíamos tenido ningún problema.siempre habíamos ido a comer.pero esta noche hemos decidido ir a cenar y ha sido un completo desastre.
Teníamos reserva a las 22.30.hemos pedido 3 platos para compartir con nuestra botella de vino y en menos de 40 minutos nos hemos tenido que levantar de la mesa.la comida servida muy rápida y fría. Te meten mucha prisa para dejar libre la mesa ya q cambia el ambiente del local y dan paso a un dj q empieza a las 23: 00h. No recomiendo ir a cenar no se está comodo.

Ambiente cosmopolita. Decoración agradable.

La cocina está realmente conseguida dado el tamaño de la carta y el local. Pedimos para compartir, calculando dos platos por comensal y acertamos.

Con un postre y dos botellas de vino salimos 4 pax por 140€. Relación calidad precio buena.

En contra, al llegar te recuerdan (ya lo hacen en la reserva) que tienes dos horas para cenar. Te traen la cuenta sin pedirla si has terminado y ha llegado la hora. Detalle realmente feo. Es lo que tiene el éxito.

No me gustó nada. Después de llevar 2 semanas hecha la reserva nos sentaron frente a la puerta, lo que implicó pasar frío toda la cena.
Los precios desorbitados, no solo por la calidad que es bastante normalita, sino porque no dejo de ver incocherente que un simple huevo cueste 5€, por no hablarde los 35€ que pagamos por un pan que ni pedimos.
Finalmente a la hora y media de llegar nos levantaron corriendo de la mesa para que entrase el siguiente grupo, con muy malas formas y una completa falta de educación, a lo que además añadiría que intentaron colarnos en la cuenta una botella de 80€ de vino, gesto por el que nisiquiera se disculparon.

Una decepción. Tenía reserva desde hace una semana para una comida con amigas, pedí salón para no pasar frío, nos pusieron en la mesa al lado de la salida por lo que al salir los camareros nos congelamos de frío. Tuvimos que cambiarnos a la terraza cubierta porque allí no había corriente y se estaba mejor. Tardaron mucho en servir la comida y tuvimos que reclamarla. He estado en otros restaurantes del grupo Larrumba (Peyote y Habanera) y han sido excepcionales en su trato, la verdad una decepción. Lo único que salvó la comida fué la atención del camarero Adolfo, creo recordar que nos atendió bien a pesar de todo lo que pasó.

Comida Fría, raciones muy escasas y caras.
Reservamos con dos semanas de antelación y nos pusieron en una mesa enfrente de la puerta, y los que estábamos sentados de espaldas y pegados a ella pasamos toda la cena congelados.
Se equivocaron con cuenta incorporándonos una botella de vino de 79,99 euros, y después de echarnos de la mesa porque venía otra reserva, ni se disculparon por equivocarse con la cuenta.
El sitio es muy bonito, poco más.

La comida nos ha gustado y los camareros son muy agradables. Los dos "peros" han sido que han tardado una eternidad entre plato y plato y que nos tocó bajo el chorro del aire acondicionado y estuvimos helados. Aun así, es un sitio totalmente recomendable y repetiremos.

Bien situado. Comí solomillo y estaba bueno pero tratándose de un plato que vendían como healthy, las verduras estaban pelín grasientas. Pedí mesa en la terraza porque el interior estaba demasiado oscuro para comer a mediodía entre semana. Es mono pero sin duda bastante postureo para lo que es.

Es la segunda vez que vamos al Brunch y ha sido decepcionante, han tardado mucho en servir, no han puesto los menús de brunch completos y poca cantidad, todo comparado con la primera vez que fuimos.

Un lugar muy agradable, los camareros geniales, la comida muy rica y luego de cena el ambiente y la música es la clave para pasarla bien con los amigos.

Lugar super exquisito para tomar el brunch, salimos de allí como para no comer a medio día para nada de la gran cantidad de comida que ponen, el servicio muy atento y la calidad y eleboracion de los alimentos muy detallada e insuperable.

Son unos PEDAZO DE SIN VERGÜENZAS. Casi a mano armada me hicieron un regalito de cumpleaños cobrandome 6,50 por una cutrez de tarta del mercadona con un par de lacasitos SIN HABERLA PEDIDO. 68,90€ en total me gaste para 2 personas, por un plato de ceviche, que no era ni ceviche ni era nada, eran unos boquerones fritos en un plato con decorado tropical. 3 albóndigas de rabo de toro de mírame y no me toques, y 3 brochetas de pollo teriyaki MÁS FRÍAS QUE EL GÉLIDO GLACIAR. 5 euros por persona por el servicio del pan, y lo más gracioso fue cuando se enteró el camarero de que era mi cumpleaños. Salió por la parte de atrás con una tartita y una vela cantandome el cumpleaños con otra camarera. Inocente de mí, pensé, que majos oye. Vaya detalle. Cuando se presentaron con la cuenta y me cobraron 6,50, repito, por la bazofia de tarta, sin yo haberles pedido absolutamente NADA. En fin. SITIO PARA NO RECOMENDAR NI A TU MEJOR ARCHIENEMIGO.
Saludos cordiales sinvergüenzas

Hemos reservado para hoy a las 11, nos dicen que en la terraza climatizada, temperatura actual 10grados, y nos sientan en una mesa a la misma temperatura que en la calle. Obviamente nos hemos ido, según ellos ninguna mesa estaba disponible pero sólo había 4 ocupadas. Pésimo servicio, no es necesario ser tan arrogante y tratar al cliente como si fuera tonto.

Muy chic, ambiente muy agradable, se come bien, échale al menos 25 por persona. Moderno, con terraza, distintos espacios, decoración atractiva. Para estar con amigos, parejas. Para repetir

This place is really nice for brunch. A little on the upscale side but friendly staff and atmosphere. Our waitors was so forgetful, it was almost funny. I don't think they got one order right, but we did'nt mind.the food and drinks where good.
Would defenetly recomend!

Unos amigos me llevaron a este restaurante. No sabía dónde iba, pero me sorprendió mucho el sitio. Es un local muy agradable, con un trato exquisito y comida muy rica. Se acierta con todo, pidas lo que pidas y la decoración ayuda a estar cómodo