Restaurante y Alojamientos Casa Aldaba, La Hiruela

Fuimos a comer con reserva un fin de semana. El restaurante muy bonito, con baños limpios.
El menú eran 25€ y no te incluyen bebida. Total que pedimos de carta, y había un chuletón de vaca fuera de carta (sin precio). Decidimos pedirlo porque al estar en la sierra te esperas un chuletón de calidad. Finalmente el precio era de 45€, por un chuletón de vaca de 3/4kg supuestamente, dejando bastante que desear la calidad y la cantidad de carne.
Por otra parte, pedimos una segunda ración de pan, y se notaba demasiado que había sido descongelada de mala manera, porque a los dos minutos estaba como una piedra.
El resto de los platos, aceptables, pero nos esperábamos más teniendo en cuenta los precios. Me sentí engañada.

Pedimos dos menús del día de primero judías verdinas con morcilla, segundo jabalí y el postre la tarta de queso casera. Las judías eran pintas y le faltaba bastante sabor, el jabalí fue lo mejor tierno y bastante rico. Tengo que poner dos pegas el PAN que nos dieron con el menú durísimo y el cual reclamamos y se ofrecieron a cambiarlo lo malo que cuando nos fueron a traer el nuevo ya estábamos con el postre y la segunda es que creo que necesitan personal estaba una sola chica atendiendo fuera y dentro a la cual se le notaba hastiada de estar allí. Si fuera de nuevo a la hiruela dudo que repitiera en ese sitio.

Pedimos alcachofas, muy aceitadas, patatas, pueden valer, bacalao, como muy salado y al decirlo nos indican que de eso nada, esta en su punto.
Nos lo cambian por pollo sin apenas sabor, y el jabali estaba que parecia cualquier otra.cosa mas seco que la.mojama.
Un sitio para no recomendar y por supuesto no volver.
Una pena.

Después de una caminata se negaron a vendernos una botella de agua grande a 2 adultos y 1 niño, decían que las grandes eran para los que comían. Una desgracia de camarera.

Encanto en lugar de ensueño a más de 1200 metros en la Sierra Norte de Madrid.

El entorno merece una visita. Por ejemplo la ruta de los molinos a lo largo del curso alto del río Jarama

El restaurante cuenta con una bonita y pequeña terracita enfrente. Dentro es acogedor y sus platos de primera. Croquetas caseras, el huevo escalado con boletus y hojaldre o la escalivada con sardina ahumada.

La tarta de manzana, exquisita

Para ellos como si el cliente no existiera, ¿os alimentais de aire? Ni idea de atención al cliente. No deberíais tratar con tanta indiferencia y bordería a la clientela que se acerca a vosotros. No te dejan ni tomarte el café y con el pueblo bastante lleno de gente, recogen a las 16h de la tarde.se ve que les sobra el dinero. Buena suerte con el negocio, con tantas reseñas negativas podríais plantearos ser más amables.

Restaurante acogedor, buena atención del personal, la comida estuvo muy rica, para mi gusto un sitio que merece la pena.

El dueño es muy antipático. El menú es limitado y los platos tienen cantidades ridiculas. Salimos todos con hambre. Es preferible comer un bocadillo. No lo recomiendo!

No sabemos que tal es. 10 minutos de espera sin que te sirvan nos ha sido suficiente para irnos.

Atención lamentable y súper antipaticos.
Nos sentamos en la terraza y después de media hora sin servirnos nos dicen que no nos pueden dar dos cervezas porque no dan abasto, estando el restaurante vacío. Y nos echan de malas maneras.

Atención al público lamentable, parece que te hacen un favor.el que parece ser el jefe es generador de mal ambiente.

Las raciones son escasas y los platos también.

Mejor llévate bocadillo de casa

Estuvimos el día del padre, hacía mal día, y fue de casualidad entrar a Casa Aldaba, una atención muy cuidada por parte del maître, y la comida muy rica, el jabalí, las alcachofas, y el postre tarta Tatín de manzana.lo recomiendo. El precio algo elevado, la bebida va aparte, aunque merece la pena probar su cocina

Lamentable atención. Después de esperar.limpiarlos la mesa.atendernos.nos dicen que nos tenemos que levantar porque la mesa está reservada.
Da la sensación que no quieren que te sientes.
Nos dicen donde hay otro bar más abajo hacia la plaza. Evidentemente no volveré aquí.

Rte. En La Hiruela. Se me hizo caro ver un menú de 25€ por persona sin bebida. No tienen mas que carta.

El restaurante es tentador por ser de los pocos que hay en el pueblo y estar bien ubicado
El encanto lo pierde al conocer al dueño, mal educado y antipático, nos alegramos de no haber comido allí, al cliente hay que cuidarlo.
También mencionar un ratoncillo dentro del restaurante paseando por debajo de las mesas, aunque después de conocer al dueño casi que el ratón pasa desapercibido.

Me esperaba más la verdad. Aunque el servicio es bueno y el sitio muy acogedor, la comida deja que desear. Daba la sensación de estar todo cocinado del día de ayer y precalentado. Además, de no ser barato.

Tranquilo. La Hiruela se ha convertido en un parque temático. Como un hormiguero en día de fiesta, aparqué a 2 km.que feliz idea tuve aquel día!

Lugar acogedor y buen servicio.
Por otro lado, la relacion calidad precio del menú del fin de semana en mi opinión tiene mala nota. El precio caro para una calidad del menu bastante regular. Lo mejor el tatin de manzana, lo peor el jabali que estaba duro y soso

Trato indiferente. Dio la sensación de que sobrabamos.
El restaurante vacio a las 4 de la tarde y nos dice "un señor" muy maleducado, que no dan cafés pq solo daban comidas a esas horas. En la mesa de al lado una pareja con sus cañitas. A las 13 30 sí que dan aperitivos con la terraza llena. Pero a las 4 no. Y todo esto con muy malos modales. Desde luego no volveremos

Nos tomamos un par de cervezas a las 13: 30h pero no nos admite tomarnos un café a las 16h porque si no tenemos reserva, no podemos. Está claro que el dueño, cuando repartieron los cursos de "atención al cliente", no se puso en cola. Un consejo, si quieres hacer caja con los clientes, gánatelos. Empieza por ser amable y atender correctamente aunque solo sea para tomar café. Un saludo, campeón.