Sueñomueble, Madrid

Lamentable atención. Llegamos a una hora y media del cierre del local, detrás de una pareja que estaban pidiendo un presupuesto para su proyecto. Decidimos esperar pacientemente a pesar de que la vendedora ni siquiera levantó la vista para saludarnos, y a falta de un cuarto de hora para el cierre, decidimos preguntarla si nos atendería igualmente, sólo por confirmar lo que parecía evidente, que sí lo haría dado el tiempo que llevábamos esperando. Para nuestra sorpresa, nos dijo que no, que la enviáramos por email medidas y proyecto y ya nos mandaría un presupuesto, que era la hora de cierre. Al recriminarla amablemente el hecho de que nos tuviera esperando durante hora y media, estando mi mujer además visivlemente embarazada, y cuando nos pudo avisar antes de que ya no nos iba a atender, nos replicó orgullosa y de malas formas que era la hora de cierre y que ella se iba. Un comportamiento inaceptable de una vendedora amateur que no tiene la más mínima noción de lo que debe ser un trato al cliente eficiente y correcto.