Dani Brasserie, Madrid

Buenísima comida, la terraza con grandes vistas. El servicio muy atento, de 10. Por poner un pero la bebida algo cara. Sin duda repetiremos

Terraza muy bien y bonita. Comida muy bien. Empleados del hotel, no buenos, no hay comunicación entre ellos, mala información al cliente. Camareros
en terraza amables pero algunos les falta experiencia para mantener la calidad-precio

Be it with family, friends or just business, the location is wonderful. It is recommended to wear at least smart-casual attire.

Service is just as you expect from this place, perfect. If you are a conaisseur get your own wine, if not, just ask the sommelier.

Food is great, my tuna was a bit to rare for my taste, but very fresh and tasty. Their interpretation of flan is not quite flan, but it is out of this world.

I also recommend reservation, you can get a reservation quite easy, so better do it.

As for safety measures, they are more than OK.

Soy gran seguidora de la cocina de Dani García y siempre voy a probar sus restaurantes pero la política de este restaurante en partícular me parece absurda y no favorece al cliente en ningún caso. Llamo para hacer una reserva en el restaurante para una ocasión muy especial, indico que por temas de COVID quiero hacer mi reserva en la terraza y me dicen que no puede ser, que por política de empresa (no sé que política es esa), me reservan una mesa y ese día verán o no si pueden ponerme en la terraza y que hasta ese momento no me lo podrán decir. Yo le indico que para mi no es una opción, que si no puedo reservar en la terraza no voy a ir, ya que es mi decisión querer cenar con la mayor seguridad posible y me dicen que entonces lo siente pero que no puede hacerme la reserva. Ahora mismo, sigo sin entender esta política absurda y que en lugar de facilitar el ocio con seguridad, solo ponen trabas a los clientes que quieren pasar un rato agradable al aire libre. Un restaurante que tiene terraza, un cliente que llama para reservar en la terraza y ninguna facilidad. Lo cierto es que pierdes la ilusión antes de ir.