Estado Puro, Madrid

Una vergüenza que Paco Roncero se preste a dar nombre a este restaurante.

La peor experiencia de Madrid, no sé cómo Paco Roncero se presta a esta aberración.
Reservamos 24h antes para 9, hemos llegado a la hora y no estaba ni en pensamiento de montarse.

Poco personal, 45 minutos para una paella, mala, un arroz hervido tiene más sabor. Nos hemos tenido que ir sin postre.

Caro, malo y raciones minúsculas, por no entrar en un servicio lento. De vergüenza.

Es parte de un hotel, tiene una pequeña terraza a nivel de calle en Neptuno y es un ambiente tranquilo

On vient de payer 10.75 EUR pour une Tortilla Española de 16.33 cm de diamètre. Et concernant les serveurs et leur accueil j'adhère aux autres googlistes qui ont donné 1, voir 2 étoiles.

Ottimo, veramente ottimo. Siamo tornati due volte perché ne vale la pena. Boquerones, insalata russa, polpo e tortillas

No tiene nada qué ver cuándo yo lo conocí por primera vez.
La calidad deja mucho que desear, la cerveza es la más barata el vino ponen albariño 3,50 €
Copa y te sirven ribeiro malo. Y la comida en la misma linea. Las ultimas veces ya se notaba la dejadez, pero el otro día fue la confirmación, no merece la pena volver.

Tardan mucho para traer un plato llegamos a las 13: 45 solo 3 personas para comer y eso fue eterno solo para una segunda bebida más de 20 minutos de espera más de 2: 45 minutos para poder comer el personal muy amable pero el chico que estaba a cargo un poco borde y le hablaba mal a los camarera estás experiencias muy mal creo que no volveremos a este local

Un restaurante que sorprende porque estando en zona turística sirve comida de muy buena calidad. Situado a un paso del museo del prado. Carta muy cuidada con precios nada desmedidos. La decoración del local es original. El trato es cordial y atento

Comida pretenciosa, algunos platos notables pero otros vulgares, a precio de estrella Michelin. Para guiris

Probamos una hamburguesa que está excelente; las patatas bravas, en nuestro caso, se habían ido de “descanso”, el picante no existía, una gota de mayonesa por encima y listo. Lo que no se puede negar es que las patatas estaban bien fritas y sabrosas. Muy rico todo.

Facing the lovely fountain this place is simple, neat and modern. We ordered the potato croquettes, ceasar salad and manchego burger and all was delicious. Service was good however we struggled to make the waiter understand what we wanted since he barely speaks or understands few words of English.

Al parecer ha cambiado de dueño y de cocinero, la verdad es que no lo recomiendo antes estaba genial, la comida excelente, el personal rápido y amable. Pero ahora el personal deja mucho que desear, la comida fría y sin sabor, tardaron mucho en atendernos a pesar de que había poca gente, la verdad es que no volveré, es una pena, pues antes cada vez que visitó Madrid acudía a este sitio.

Una pena este sitio, mal servicio, pide un vino y ni una patata frita, tienes que perseguir al camarero para q te cobre o para pedir otro vino. Desde luego no vuelvo.

Sitio que deja algo indiferente. La comida, sin más para el precio que tiene. La atención correcta, aunque los camareros a veces soltaban alguna gracieta que.en fin. Un cartel gigante de Mahou en la pared, pero no tienen Mahou para beber. La decoración sí es original, con toda una parte llena de peintas. No creo que vuelva.