Hotel Eurostars Madrid Tower
Direccion | P.º de la Castellana, 259, B, Madrid |
Telefono | +34 913 34 27 00 |
Sitio web | www.eurostarshotels.com/eurostars-madrid-tower.html |
Categories | Hotel |
Clasificacion | 3.7 56 opiniones |
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Hotel Eurostars Madrid Tower opiniones
56Muy acogedor con buenas piezas. Buen trato y vistas desde todas las ventanas. El salón de desayuno es grande con buffet variado.
Muy cómodo, no le falta un detalle en la habitación, cama y almohadas muy confortables, habitación grande y muy limpia, todo perfecto. Desayuno bueno y variado y atención excelente de todo el personal del hotel. Volveremos seguro.
Un hotel espectacular. Enorme y moderno. Las habitaciones muy amplias y limpias. El servicio y recepcion muy amables y dispuestos. Volveremos sin duda
Tarifa: 170€ (AD)
En una de las cuatro torres del final de la Castellana que han cambiado el paisaje urbano de la ciudad se encuentra este espectacular hotel, sobre una enorme plaza con una generosa explanada, con algunos grandes maceteros, en la que estacionar el vehículo. Nos acercamos con el mismo hasta la puerta con idea de descargar el equipaje y que alguien se hiciera cargo del mismo, pero un correcto botones nos indica que no hay servicio de valet y que bajemos nosotros el coche al garaje del hotel y desde allí subamos a recepción con el equipaje.
La recepción, para un edificio tan grande, resulta justa de tamaño. De forma curva. En el centro, una enorme puerta giratoria. Paredes de cristal a la calle por las que entra la luz de la ciudad que contrasta con lo negro de paredes, techo, cortinas, alfombras y sofás. A la izquierda antes de unas escaleras que bajan hay una mesa, algo alejada, con chucherías y bebidas de bienvenida. A la derecha hay un largo sofá para esperar a los clientes, situado sobre una alfombra de pelos largos. Frente a la puerta, embutidos, en la pared, dos mostradores de recepción. Llenos de empleadas. Tres puestos en cada uno. Nos atiende una joven que está al teléfono. Empieza el proceso de check in pero enseguida sigue con su llamada de teléfono y pasa la misión a otra compañera. Simpatiquísima. El proceso es largo, y tedioso, pero la empleada lo hace agradable. Nos pregunta por nuestro viaje, por el clima, por nuestra ciudad, nos explica todos los servicios del hotel y sus horarios, el wifi que es gratuito en todo el hotel con una clave extraña. Nos entrega las tarjetas que hacen de llave de la habitación y nos desea que disfrutemos de la estancia y que nos guste el hotel.
Avanzamos hacia la derecha y casi ocultos al fondo encontramos el bloque de ascensores. Hay seis, pero tardan más de lo debido en llegar. La espera se hace algo larga viendo cómo los otros suben y bajan en las pantallas digitales ubicadas sobre las enormes puertas metálicas. Dentro todo es enorme: anchura y amplitud, espejo en la pared del fondo, botones a ambos lados y una pantalla interior que indica velozmente el piso por el que se está pasando. Cuando las puertas se abren en el piso 25 salimos a un rellano gemelo del de la planta baja. A la izquierda encontramos un pasillo que en suave arco gira a derecha e izquierda. Un placa metálica indica la ubicación de las habitaciones. La nuestra queda hacia la derecha. Caminamos por el pasillo curvo. Suelo de moqueta limpia en tono verdoso. A la izquierda, en una pared forrada en madera con luces retranqueadas encontramos las enormes puertas de las habitaciones. A la derecha, también madera y algunos huecos en los que se disponen murales con motivos olímpicos. Techo muy alto, calma y elegancia. Junto a la puerta de la habitación hay una repisa como para dejar una bandeja, y sobre ella el número de la habitación. Acercando la tarjeta al pomo de la puerta esta se abre.
El suelo deja la moqueta para convertirse en madera rojiza brillante muy cuidada. A la derecha hay una larga pared de madera algo más oscura con un par de murales altos y estrechos con dibujos de proyectos y bocetos de la torre. También un interruptor de la luz con un selector de distintas posiciones lumínicas. A la izquierda, una pared de cristal con un vano (sin puerta) que hace de entrada al baño. Un poco más adelante, y también en cristal las dos puertas plegables del armario. Enorme y empotrado con una zona de colgador alto, otro corto, cajones, y baldas. Un montón de perchas normales de distintos tipos, dos albornoces mullidos con sus zapatillas, una caja fuerte, unos almohadones y mantas de repuesto, una plancha y una pequeña tabla de planchar.
Justo enfrente y en el vértice de acceso al dormitorio está el display del aire acondicionado que funciona perfectamente en la posición auto. Un botón para seleccionar potencia y una rueda para marcar la temperatura. Quizá un punto ruidoso en las posiciones más potentes. Y allí mismo comienza el dormitorio. Enorme y generoso de tamaño. Elegante.
Desafortunadamente mi estancia en este hotel ha sido decepcionante por lo siguiente:
- la primera noche no pudimos dormir porque el aire acondicionado hacia mucho ruido. Después de insistir varias veces y un par de visitas del técnico nos cambiaron la habitación. El cambio de habitación se hizo sobre las 6 de la tarde, pero tuvimos que contactar con la recepción 3 veces mas para que nos trajeran la cama supletoria, finalmente sobre las 10 de la noche la trajeron.
- la televisión de la habitación nueva estaba estropeada, la imagen se perdía a menudo.
- la ducha tenia muy poca presión de agua.
Considero que este hotel no se corresponde a un hotel de 5*
Los servicios y el alojamiento muy buenos, solo que la terraza estaba cerrada, lo que no esta muy bien durante el verano,
Magnifico hotel ubicado cerca de plaza castilla de Madrid. Servicio y atención excelente. Si te ha sido útil esta reseña por favor marca un me gusta.
Trato excepcional y limpieza muy buena, pequeños detalles marcan la diferencia, y este Hotel los tiene. Facil comunicacion con cualquier lugar de Madrid.
Lo que se espera de un 5 estrellas, sencillamente espectacular, vistas muy bonitas de madrid. Las habitaciones domotizadas, súper limpias y muy modernas. Las camas muy grandes y en el centro de madrid, lo mejor el restaurante en la planta 30. Seguramente volveré, ya que el sitio es perfecto y en el centro de madrid.
Lo mejor de este hotel es sin duda la vista de Madrid, por lo demás es como cualquier hotel 4 o 5 estrellas, el restaurante comida buena poco espacio, el spa bonito poco espacio, gimnasio bonito poco espacio pero todos con grandes vistas de Madrid. Hotel de negocios
Trato agradable, comida en el Volvorrta muy bien, habitación el suelo sucio. Las vistas que era por lo que habíamos decidido ese hotel, no fue lo que esperábamos. La mejor visión a la Castellana la tapa una de las torres. Lo mejor la comida en el Volvoreta y el trato.
Came for a reception looking forward to the views. Found myself underground in some kind of windowless hangar.
Tanto si estas de viaje por trabajo como por turismo, hospedarse en el Eurostars Tower es todo un acierto.
El hotel cuenta con unas vistas espectaculares de la ciudad y se encuentra a 9km del centro de Madrid, se puede acceder fácilmente por el paseo de la Castellana. El aparcamiento cuesta 25€/día pero hay un parking justo en frente del hotel donde se puede aparcar sin problema.
Recomiendo coger la habitación con desayuno, el buffet ofrece productos de gran calidad con unas vistas impresionantes.
La habitación perfecta, grande, limpia y muy bonita.
El baño algo oscuro, con bañera y ducha.
El buffet del desayuno espectacular y en la última planta con unas vistas inmejorables
Si consigues una oferta que ronde los 130€ no dudaria en repetir. Pero no cumple las expectativas de un hotel de mas de 200€. No impresiona. El baño moderno pero incomodo al tener puerta la ducha y el wc si habres uno se aparta la toalla de suelo y las zapatillas al sañir de la ducha. Puedes resvalar en la ducha y los chorros al dar directamente en su puerta es un poco desastre todo mojado al salur. Bañera pequeña y como tenia un goteo dejaba marca amarilla debajo q no quitaron. Una lámpara colgante un picovsuelta y manchas en cabecero y techo. Muy útil y curioso los kits de plancha trajes y normal. Muy bien el calentador de agua para hacerse un te. Bar con cóctel, mojito, 15€ y cerveza grande 9€ eso sí te ponen pastillas y Manises.
Facilidad para aparcar fuera en zona azul que desde las 3 de la tarde del sábado y el domingo no se paga al otro lado de la carretera que se pasa por un túnel subterráneo.
Experiencia de Altura! Es un Hotel MH! Estuvimos en la planta 23 y me recordó al Hotel Intercontinental de NY. Las habitaciones son modernas, amplias, con vistas espectaculares! Cuidan todos los detalles, el gimnasio era fabuloso. La ubicaciòn es Magistral. El personal es profesional y muy atento. Relación calidad-precio Sobresaliente! Estamos deseando volver al Eurostars Madrid.